En una columna especial para MisionesOnline, la Sommelier María Alejandra Escobar invita a conocer sobre la variedad de cepas argentinas, y en especial la aceptación que está adquiriendo el Tannat, oriundo del sudoeste francés y referente actual del vino uruguayo que tiene su lugar en el país. Y no deja de ser una cepa salvaje con carácter rústico.
Cuando hablamos de vinos, nos referimos a las cepas de las uvas. En general se conoce también a las variedades de vino como cepas de vinificación. La cepa es por definición el tronco de la vid, del cual brotan los sarmientos, las hojas y los frutos de uvas, agrupados en panículas (racimos compuestos con grumos de uvas).
Las cepas se dividen en dos aspectos, están las cepas de vinificación, de cuyas uvas se extrae el vino, y las cepas de mesa, cuyas uvas se destinan al consumo fresco o para pasas.
La forma de las hojas y de las uvas es lo que da a cada cepa sus características.
La cepa es lo que le da al vino su carácter varietal, que incluye el aroma, el sabor o paladar, y la textura. La elección de la cepa es por lo tanto fundamental para determinar el carácter del vino.
Los principales cepajes de Argentina son: Cabernet Sauvignon, Malbec, Merlot, Syrah, Pinot Noir, Sangiovese, Bonarda, Tempranillo, Sauvignon Blanc, Semillón, Chardonnay, Torrontés, Chenin, Riesling, y Viognier. Y estoy segura que todavía no has probado toda esta variedad, que es nuestra.
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El día internacional del Tannat
El 14 de abril celebramos el Día Internacional del Tannat, y hoy te invito a conocer y a que te animes a esta cepa.
La fecha es en homenaje a Pascual Harriague, quien nació el 14 de abril de 1819 y fue un personaje clave para introducir la cepa a Uruguay, desde la provincia argentina de Entre Ríos. En la actualidad, el Tannat es la cepa emblema de Uruguay, así como en Argentina lo es el Malbec.
En nuestro país se cultiva Tannat desde finales del siglo XIX, desde la zona del Noroeste en Entre Ríos, Mendoza y San Juan.
En la actualidad, en la Argentina solo existen 874 hectáreas distribuidas principalmente entre el Noroeste y Cuyo, aunque algunas plantas de Tannat pueden encontrarse en Patagonia y hasta en los nuevos viñedos de Buenos Aires, próximos al Atlántico, sin dejar de reconocer la alta calidad del tannat de los valles Calchaquies, en Salta.
La zona de Luján de Cuyo es uno de los viñedos más antiguos de la Argentina. Fue plantado en 1895, lo que da cuenta de su presencia en suelo mendocino, junto con algunas selecciones -previas al ataque de plagas como filoxera- de Malbec y Tempranillo (previo al ataque .
Durante sus 125 años de argentinidad, este varietal oriundo del sudoeste francés y referente actual del vino uruguayo, no deja de ser una cepa salvaje con carácter rústico.
El potencial del Tannat está en su maduración tardía, que encuentra en los terruños áridos y soleados de montaña y así se producen tintos intensos, de buen paladar con frescura firme.
Desde los valles Calchaquies, donde se pueden esperar vinos frescos con fruta roja más evidente de trazos florales y un centro de boca vibrante, hasta Mendoza donde la cepa puede ser más potente con importante estructura tánica, y ofrecer frescura con cierta acidez, sin dejar las particularidades del tannat patagónico y aquellos de los nuevos viñedos de Buenos Aires, tenemos una amplia oferta de tannat.
Solo queda acercarte a la vinoteca y buscar ese tannat para acompañar esa carne roja a la parrillas, o bien las pasta con una salsa potente.
¡Salud y que lo disfrutes!
Sommelier María Alejandra Escobar
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