Tras la sequía, un mapa meteorológico confirma la mejoría en el balance del agua en el suelo en zonas agrícolas de Argentina: Misiones en azul

La información recopilada evidencia una mejora sostenida del contenido de agua aprovechable en el suelo en todo el país, un alivio esperado después de un año difícil para la producción agropecuaria debido a la sequía. Según este mapa, Misiones es la única provincia que desde el 2022 se mantiene en una situación favorable.

Tras un año marcado por la sequía, un reciente mapa meteorológico elaborado por el INTA, la Facultad de Agronomía de la UBA y el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) revela una notable mejoría en el balance del agua en el suelo. El análisis se centra únicamente en el agua aprovechable por los cultivos hasta un metro de profundidad, y mientras otras provincias experimentan mejoras, Misiones se sitúa nuevamente entre las más beneficiadas.

Este año, un total de cuatro provincias muestran un tono verde en el mapa, en comparación con el año anterior, donde Misiones era la única región con este distintivo color.

La información recopilada evidencia una mejora sostenida del contenido de agua aprovechable en el suelo en todo el país, un alivio esperado después de un año difícil para la producción agropecuaria debido a la sequía. Estos datos son especialmente relevantes en el contexto actual de siembra de soja, un cultivo vital que, en condiciones normales, contribuye con unos US$20.000 millones anuales a través de su complejo de harina, grano y aceite.

El contraste entre los mapas de 2022 y 2023 sobre el contenido de agua útil en el perfil del suelo es notorio. En la imagen de noviembre de 2022, el país aparece mayoritariamente en tonos rojos, indicando escasez de humedad, con destellos amarillos representando reservas mínimas. Sin embargo, en esa misma fecha, Misiones destacaba como una excepción en el extremo nordeste, mostrando un tono verde que simbolizaba una reserva hídrica.

Este cambio positivo en el panorama climático es respaldado por las precipitaciones registradas en las últimas semanas, contribuyendo al aumento del agua disponible en el suelo. Aunque aún se espera que continúe la recuperación, los indicadores actuales sugieren que la recomposición de la humedad en el suelo avanza de manera firme y alentadora para el sector agrícola argentino.

 

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