Jornadas de Salud Mental | La ansiedad y el estrés y el impacto en la sexualidad

Durante las X Jornadas de Salud Mental, que se llevaron a cabo en el Hospital Madariga, el especialista en psiquiatría y sexólogo clínico, Sebastián Horrisberger, arrojó luz sobre un tema crucial pero a menudo subestimado: la ansiedad y su influencia en la vida sexual de las personas, tanto a nivel individual como en la dinámica de pareja.

El Dr. Horrisberger destacó que la ansiedad puede manifestarse de diversas formas en el ámbito sexual, lo que puede dar lugar a problemas personales y de relación. A nivel individual, uno de los efectos más evidentes es la disfunción eréctil, así como la dificultad en la excitación y el orgasmo. Además, la ansiedad puede llevar a evitar los encuentros sexuales por completo.

A nivel de pareja, dijo que la ansiedad puede provocar fallos en la comunicación y discusiones que afecten la armonía de la relación. Las personas también pueden llegar a creer erróneamente que su pareja está involucrada con alguien más, lo que agrega un elemento adicional de estrés.

En este sentido, dijo que el estrés cotidiano, derivado de preocupaciones económicas, laborales, familiares o de cualquier otra índole, es uno de los principales desencadenantes de la ansiedad que afecta la vida sexual. Este estrés puede manifestarse como disminución del deseo sexual, dificultades en el rendimiento y la incapacidad para disfrutar plenamente de las experiencias íntimas.

El Dr. Horrisberger enfatizó la importancia de buscar ayuda profesional cuando se enfrenta a estos problemas. Ya sea un médico o un psicólogo, estos profesionales están capacitados para abordar las preocupaciones sexuales y ayudar a las personas a superar los obstáculos que la ansiedad puede presentar en su vida sexual.

«Lo más importante es que las personas que se identifican con estos problemas busquen atención médica o psicológica», afirmó el especialista. «Los profesionales de la salud están dispuestos a ayudar y pueden derivar a especialistas en psicología clínica o salud mental si es necesario».

Por último, remarcó que la ansiedad puede ejercer un impacto significativo en la sexualidad de las personas, tanto a nivel individual como en la relación de pareja. Sin embargo, «la buena noticia es que hay ayuda disponible y profesionales especializados dispuestos a guiar a quienes enfrentan estos desafíos hacia una vida sexual más saludable y satisfactoria. La comunicación abierta y la búsqueda de apoyo son pasos clave en el camino hacia una mejor calidad de vida sexual»

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