#VeranoenMisiones | Aristóbulo del Valle ofrece naturaleza, gastronomía regional y arroyos para disfrutar de la temporada

El entorno natural, las caídas de agua y los paisajes de la selva son las joyas de Aristóbulo, localidad que se prepara para esta temporada con distintas actividades al aire libre y amigables con el ambiente. Trekking, mountain bike, paseos turísticos y gastronómicos, visitas al Valle del Cuña Pirú y al Salto Encantado son algunas de las tantas propuestas a las que podés sumarte.

Sin dudas, el Salto Encantado, una caída de agua de 64 metros, es uno de los atractivos principales de la zona. El Parque Provincial, ubicado en el municipio Salto Encantado, alberga este salto homónimo y otros, y es un sitio ideal para el trekking y avistaje de aves. Recibe a cientos de turistas que recorren no sólo Aristóbulo del Vallle sino otras ciudades cercanas.

Con una superficie total de 13.227 hectáreas de Área Natural Protegida, el arroyo Cuña Pirú hace su recorrido entre la frondosa vegetación, atravesando el parque. Está abierto todos los días, de 9 a 17 horas. 

Los miradores del Valle del Cuña Pirú son puntos que regalan imponentes paisajes en la provincia. Ubicados sobre la Ruta Provincial 7, resultan espacios ideales para detenerse y observar la selva misionera. 

Conocida como la capital de los saltos y cascadas, destacó Luis Bernal, director de Turismo de Aristóbulo del Valle, el municipio ofrece distintas alternativas para disfrutar de la vegetación y las caídas de agua. 

Una de las opciones para disfrutar del verano es el Agrocamping Salto de Piedras Blancas, que cuenta con una pendiente rocosa de 8 metros de altura por la que fluye el arroyo Alegre, formando una cascada en la cual se destacan rocas blancas. Este espacio posee cabañas para 4 y 6 personas, área para acampar, proveeduría, sanitarios y quinchos. 

Algo característico de Aristóbulo es su museo natural o Parque Lineal Cainguás, un área natural que recorre toda la avenida principal de la ciudad. Se conforma de 10 plazoletas, decoradas con distintas esculturas, y fue declarada Patrimonio del Municipio y de interés provincial. 

La ciudad también cuenta con senderos interpretativos de la comunidad Yvytu Porá. Este recorrido puede llegar a durar hasta hora y media. En el transcurso, los visitantes pueden conocer parte de la historia y cultura de la comunidad originaria: se muestran las trampas que usaban para cazar, las plantas medicinales que utilizaban y cómo recolectaban las frutas silvestres.

Aristóbulo del Valle, ubicado en el departamento de Cainguás, es un municipio al que se puede acceder tanto con vehículo propio como con líneas de ómnibus. La Ruta Nacional N° 12 y la 14 son las vías principales de acceso, para luego llegar a la ciudad por la RP 7. 

 

Qué probar de la gastronomía de la región y de Aristóbulo del Valle

Parrillas, menú a la carta, tenedor libre y platos regionales destacan entre la propuesta gastronómica de la localidad. No obstante, los dulces caseros, hechos con ingredientes de la zona, encantan el paladar de cada turista que visita la ciudad. 

Se pueden encontrar estos productos en la Feria de Artesanías dentro del Parque Provincial Salto Encantado.

Dónde alojarse en Aristóbulo 

Respecto a hospedajes, Luis Bernal detalló que los visitantes pueden encontrar distintos tipos de alojamientos en la localidad, desde hoteles, hasta cabañas y lodges.

Para conocer más de la oferta hotelera, gastronómica y de las distintas actividades para realizar en Aristóbulo del Valle, quienes estén interesados pueden comunicarse a través de Facebook e Instagram, @adelvalleturismo, o revisar la web, adelvalleturismo.com.ar. 

 

Turismo luego de la pandemia de covid y nuevas oportunidades para volver a conocer la tierra colorada

Bernal destacó que, tras la pandemia, se potenciaron los distintos atractivos naturales de la región: “Fue un click para muchos, a la hora de valorar otro tipo de cosas y se empezó a valorar lo que tenemos en la provincia”, observó. 

El turismo interno fue uno de los más impulsados durante el regreso de la actividad turística, lo que permitió que misioneros puedan redescubrir su territorio y aprovechar de manera distinta los distintos atractivos y actividades para realizar.