“Misiones es el lugar ideal para las energías renovables”, destacó el presidente de la fábrica de  biomasa, René Mangiaterra

La fábrica de biomasa instalada en Cerro Azul fue inaugurada oficialmente el sábado. "En el 2016 se reglamentó la lay de promoción de energías renovables y el lugar ideal es Misiones y emprendimos el estudio y ahí arrancamos”, recordó su presidente, René Mangiaterra.

Luego de que se inaugurara formalmente la planta de generación de energía ubicada en Cerro Azul, el presidente de MM Bioenergía, René Mangiaterra, ponderó a Misiones como un sitio ideal para llevar adelante proyectos de sustentabilidad y energías renovables.

“Un poco el espíritu ese de hacer cosas y ver cómo se manejaba el mundo y el cuidado del medio ambiente, estaban dadas todas las condiciones. En el 2016 se reglamentó la lay de promoción de energías renovables y el lugar ideal es Misiones y emprendimos el estudio y ahí arrancamos”, recordó el empresario santafesino durante una entrevista en Misiones Online TV.

 

Mangiaterra recordó que el proyecto se desarrolló durante cuatro años en los cuales los inversores pasaron avatares e inconvenientes. “Somos de origen de una empresa Pyme. Decidimos hacer esta inversión planificada desde hace cuatro años atrás y nos costó mucho”, recordó.

 

El empresario recordó que el desarrollo de la planta es totalmente privado y aclaró que el marco regulatorio para  su puesta en marcha fue establecido por la Nación.

 

“Lo que tuvimos que hacer es cumplimentar algunas leyes provinciales, por ejemplo como se llega a obtener un estudio de impacto ambiental y algunas otras regulaciones. Pero el marco para el desarrollo de estos proyectos fue en el marco del Renovar 2, de la Nación”, reveló.

 

Además de generar energía, la planta utiliza materia prima principalmente misionera, por lo que el movimiento económico generado en su entorno favorece el desarrollo de las firmas locales. “Ahora estamos comprando en toda la zona, salvo un aserradero que viene del norte de Corrientes, pero con lo que se produce en la zona es suficiente y estamos sin problemas de aprovisionamiento”, remarcó.

Mangiaterra indicó que en principio, el proyecto contemplaba el procesado de la materia prima en Misiones y su traslado para producir la energía en una planta en Santa Fe.

 

“En esencia se rompe el balance del carbono (objetivo de este tipo de emprendimientos) porque el combustible que se usa para llevar la materia prima a 900 kilómetros hace que el espíritu de la ley no se cumpla”, explicó.

 

En ese sentido, el empresario dejó en claro que se la denomina energía renovable y limpia porque la  madera que se utiliza para hacer el chip proviene de árboles implantados.

 

“Nosotros tenemos controles y auditorias de organismos internacionales. Donde nosotros compramos el chip, los aserraderos no pueden ser de nativas, ni siquiera puede tener mezclado. El aserradero debe ser específicamente de madera implantada”, indicó.

 

Mangiaterra señaló además que esa madera implantada toma una determinada cantidad de dióxido de carbono, en su fotosíntesis, en el momento en que se genera la combustión. El dióxido de carbono que emite es menor al que toma en el desarrollo.

“El balance de carbono se supone neutro porque la actividad de la recolección y la cosecha tienen algún consumo de otros combustibles que generan dióxido de carbono, pero el balance en general, cuando se produce algún tipo de energía, es neutro”, subrayó.

 

El santafesino remarcó que es importante reconocer que cuando se consume energía de este tipo, se evita que se genere energía con combustibles fósiles, que generan dióxido de carbono, uno de los responsables del cambio climático.

 

 

Para finalizar, Mangiaterra aseguró que el proceso para generar la energía es bastante simple. “Es una caldera donde, en vez de usar cualquie conmubistile fosil, en este caso es una caldera bastante importante donde el chip toma fuego y eso calienta el agua a 420 grados. En distintos tubos se va convirtiendo en vapor, se satura y luego ese vapor a alta presión entra a una turbina que hace girar un generador y eso inyecta a la red. Pero es un combustible que genera vapor a presión por el solo hecho del calor y eso es lo que hace girar las turbinas”, explicó.

 

 

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