Roberto Enríquez, presidente de Iguazú Argentina, concesionaria de los servicios en el área Cataratas, habló sobre la reapertura al público de la maravilla natural del mundo y sostuvo que el plantel de la empresa prestataria de los servicios en el parque nacional está conformado por alrededor de 250 personas, quienes en su mayoría se encontraban sin poder realizar sus actividades diarias.
Roberto Enríquez – FM República.
Iguazú Argentina es la empresa encargada de brindar todos los servicios en el Parque Nacional Iguazú y está presidida por Roberto Enríquez. En diálogo con FM República, indicó que desde el cierre del espacio natural a causa de la pandemia de coronavirus solo trabajaron unas 20 personas, las que se encargaban de las tareas de mantenimiento y seguridad.
“La situación del turismo en general es muy crítica. Lo más grave es que tampoco hay un horizonte cierto ya que recién estamos entrando en una temporada que será más complicada. Llevará tiempo”, manifestó. Aseguró que los cuatro actores fundamentales dentro del PNI (Iguazú Argentina, Jungler Explorer, restaurante El Fortín y el hotel Gran Meliá) ya han presentado los protocolos correspondientes a la Administración de Parques Nacionales y ahora están en proceso de aprobación.
“Luego de que sean aprobados, debemos darle validación con el Ministerio de Salud de Misiones ya que es el órgano central durante este tiempo”, explicó. Acerca de la recepción de turistas, en sintonía, señaló que “de extranjeros ni vamos a hablar, es imposible -que vengan-”.
Roberto Enríquez.
Enriquez enfatizó en que el 50% de los visitantes que recibían las Cataratas eran de origen argentino, porcentaje cuyo 40% se refiere a turistas provenientes de la provincia de Buenos Aires, Ciudad Autónoma y Córdoba, sitios mayormente afectados por el avance del covid-19.
“No quiero ser pesimista, pero no preveo una pronta apertura del Parque Nacional Iguazú. Habrá que ver cómo evoluciona Buenos Aires para cuando habiliten el transporte aéreo. No estamos del lado de abrirnos al turismo regional porque va a acceder poca gente y, si aparece alguien con coronavirus, nos podría invalidar todo el destino. Hay que ser cuidadoso y mantener la tranquilidad”, precisó.
Partiendo de ello, el empresario manifestó que una “solución inteligente” sería habilitar poco a poco la conexión aérea entre Iguazú y otras provincias argentinas que se encuentren con la aprobación sanitaria para operar, ya que considera a los trazados aéreos como fundamentales en el proceso de recuperación.
A.B.V.
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