Finalmente, el Restaurante La China bajó las persianas voluntariamente del local por prevención a la expansión del Coronavirus. Luego de las acusaciones por parte de una empleada, quien denunció que familiares de los propietarios, llegaron desde Encarnación, cenaron en el local y posterior a eso, compañeros de trabajo comenzaron con síntomas del COVID-19.
Según había denuncia la joven, la dueña del local le negó que asistan a un centro médico por miedo que le cierren el restaurante. Esta tarde, la propietaria dialogó con la Policía de Misiones y contó que recibió visitas para cenar con familiares de la misma nacionalidad y con domicilio en Paraguay.
Asimismo, Viviana V. de nacionalidad China informó que no presenta ningún tipo de síntomas compatibles con el Coronavirus y que contrataron un abogado para iniciar acciones legales contra la empleada.
De igual manera, el restaurante permanecerá cerrado voluntariamente hasta fin de mes.
Cp