Un suboficial de Gendarmería nacional realizaba reparaciones en el
tendido eléctrico de su casa en un sector próximo al pilar de luz, cuando accidentalmente habría recibido una descarga eléctrica que le hizo
perder estabilidad y caerse desde la silla a la que había subido. A raíz de la caída recibió un fuerte golpe en la cabeza en la región occipital con un corte de unos cinco centímetros en el cuero cabelludo.
Cuando la Policía llegó al lugar con los paramédicos, nada pudieron
hacer pues el hombre ya no tenía signos vitales.
El médico que examinó el cuerpo, solicitó la realización de una
autopsia a los fines de determinar fehacientemente la causa de la muerte. La Policía en tanto, procedió al secuestro de las herramientas halladas junto al cuerpo y labra actuaciones con intervención de la justicia letrada
jurisdiccional de turno.