Están concluyendo el montaje de imágenes. Luego viene la etapa de sonidos. Planean estrenarla antes o después del mundial. Hay muchas expectativas.
Aprendizaje. Gularte señaló que el filme le está dejando muchas cosas.
Grandes son las expectativas con la conclusión del filme «Detrás del Sol – Más cielo», que tanto dio que hablar durante su producción y filmación.
Fueron siete semanas de filmación. El objetivo inicial del filme fue rescatar lo propio en todos los sentidos. El trabajo es arduo. En breve lanzarán la página web de la película, que estará en todos los idiomas.
Gastón Gularte, director de la producción cinematográfica, informó que se encuentran concluyendo el montaje de las imágenes. «El año pasado se hizo el trabajo fundamental del armado de las imágenes; y para darle un ajuste final estamos trabajando con un montajista de Buenos Aires, Darío Tedesco, que nos permite una visión bastante neutral», explicó.
Una vez que se concluye con la etapa de imágenes, viene el armado del sonido. «Para ello va a venir el sonidista que trabajó con nosotros, Pepe Gramático. Es un proceso bastante complejo, que lleva alrededor de un mes de trabajo».
La película durará 90 minutos aproximadamente. «Los sonidos también trabajan en la acción dramática, con el argumento.
A partir de allí queda la elaboración de la música, que cuidadosamente elaborada. Tras esto, lo que resta es el armado de títulos en una productora de Buenos Aires.
«En la calle todo el mundo me pregunta. Por suerte hay muy buenas expectativas generadas. Suponemos que antes o después del mundial haremos la exhibición. El mundial es una competencia muy grande», sonrió el director.
Igualmente, Gularte señaló que quedan cosas por aprender, como la distribución de las películas y la exhibición en las salas de cine. «Es bastante complejo porque los monstruos de Hollywood y otras productoras acaparan los espacios. Entonces la pelea es también colocarla en la mayor cantidad de salas posibles y que exista la posibilidad de que la gente la vea. Es un desafío», dijo.
En Misiones, donde la prensa le dio gran publicidad, hay ya una expectativa generada. Asimismo en Asunción. «Estos son los puntos que más nos interesan. Después veremos como la posicionamos a nivel nacional y como la enviamos para participar en festivales y que recorran los circuitos», agregó.
A nivel personal y de equipo, Gularte aseguró que «hasta ahora es una experiencia muy intensa, de muchísimo aprendizaje, no solo de la narrativa audiovisual, sino de todas las experiencias paralelas de producción, de manejo de equipo» enumeró. «Hay una escena que hicimos en el Salto Klisiuk, donde disfrutan del agua, ¡y hacía tres grados!», recordó la anécdota entre risas.
La posibilidad de trabajar con actores de la talla de Víctor Laplace, Lito Cruz, el español Carlos Álvarez-Nóvoa, del paraguayo Jesús Pérez, otorgó, sin lugar a dudas, un valor agregado a la producción misionera. El director aseguró que la participación de estos reconocidos artistas permitirá una apertura al mercado cinematográfico internacional.
«Tanto Víctor, Lito, Jesús Pérez de Paraguay y Álvarez Novoa han aportado mucha experiencia. La verdad es que hemos tenido mucha suerte porque han trabajado a la par de los demás», comentó. Señaló que esto permite un trabajo de grupo de ir puliendo cosas en el filme, tanto con principiantes como con estos actores experimentados.
«A la película en sí le da un valor agregado. Igual, ellos sabían que sus personajes no eran protagonistas y que venían a dar un apoyo a una producción del interior», indicó Gularte.
«Tanto Lito como Víctor tienen cierto compromiso con la provincia. Lito cuando estaba en el Instituto de Teatro vino muchas veces acá, y Víctor vino a hacer producciones, y cuando se hacen producciones se establecen vínculos. Los dos accedieron desde un comienzo», recordó.
