Premios Ángel de la Selva | “Es muy halagador, muy incentivador, porque eso dice que uno está haciendo las cosas bien”, afirmó la radióloga Norma Garnero

La radióloga Norma Garnero inició su carrera en Leandro N. Alem como técnica en una institución privada, y en el Hospital SAMIC. Colaboró en campañas contra el Cáncer de Mama. Recibió el premio Ángel de la Selva por su trayectoria en la salud.

Hoy posee su propio servicio de Radiología y Mamografía como así también obtuvo el título de Licenciada en Producción De Bioimágenes. Formó parte del movimiento de creación de la Asociación de Técnicos Radiólogos y Licenciados en el año 2000, y posteriormente del Colegio de Licenciados y Técnicos Radiólogos, en 2022. Con más de 32 años de experiencia en el campo, ha dejado una huella imborrable en el ámbito de la producción de imágenes médicas.
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Garnero, ha desempeñado su labor tanto en el sector privado como en hospitales, donde ha trabajado colaborando con el equipo médico en el área de mamografías. Si bien se ha concentrado principalmente en la práctica privada, su labor y contribuciones en el ámbito de la salud han sido reconocidas por sus colegas y la comunidad en general.

 

Nació en la provincia de Córdoba, se graduó como técnica radióloga en la Universidad Nacional de Córdoba. Posteriormente, se especializó obteniendo su licenciatura en la misma disciplina. Casada y madre de tres hijos varones, Garnero ha logrado conciliar su carrera profesional con sus responsabilidades familiares.

La radióloga recordó los desafíos que enfrentó durante su formación, viajando a Córdoba para completar su licenciatura mientras trabajaba en el hospital de manera voluntaria. Sin embargo, la perseverancia y la determinación la llevaron a alcanzar sus metas y establecer su propio servicio en un sanatorio privado en Leandro N. Alem, en la provincia de Misiones.

Norma Garnero expresó su sorpresa y gratitud al enterarse de su elección como la más votada para recibir el premio Ángel de la Selva. Para ella, este reconocimiento no solo representa un honor personal, sino también un estímulo para continuar brindando lo mejor de sí misma en su trabajo diario. Destacó la importancia de sentirse valorada por su labor y cómo esto refuerza su convicción de estar en el camino correcto.

El premio no solo fue un reconocimiento a su destacada trayectoria de servicio, sino también una oportunidad para compartir con sus colegas y ser parte de un evento emotivo en el que se le rindió homenaje a una médica ejemplar, Marta Teodora Schwarz.

 

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