El presidente argentino, Alberto Fernández, visitará China en primavera y participará en el tercer Foro de la Franja y la Ruta para la Cooperación Internacional, según informó el embajador argentino en China, Sabino Vaca Narvaja, en una entrevista exclusiva con el medio chino Global Times.
Durante la visita del presidente Fernández a China en febrero de 2022, China y Argentina firmaron un Memorando de Entendimiento (MoU) sobre la Iniciativa de la Franja y la Ruta. El 2 de junio de este año, representantes de los gobiernos de China y Argentina firmaron un plan de cooperación en Beijing para promover conjuntamente la construcción de la Iniciativa de la Franja y la Ruta.
El embajador Narvaja le dijo al Global Times que estaba encantado de ver que Argentina y China firmaron el plan de cooperación tan solo un año después de firmar el memorando de entendimiento para la BRI. Él cree que servirá como una «hoja de ruta» para la cooperación entre los dos países en el marco de la BRI.
Afirmó que Argentina es el segundo país de América Latina en firmar un plan de cooperación con China para la construcción de la Franja y la Ruta, después de Cuba, lo cual es un «hito muy importante» para las relaciones bilaterales.
El diplomático argentino también reveló que debido a la importancia que se le da a la cooperación dentro de la BRI y a la relación entre China y Argentina, el presidente Fernández ha confirmado su visita a China en primavera y participará en el tercer Foro de la Franja y la Ruta para la Cooperación Internacional que se celebrará en China. Además, una delegación de alto nivel acompañará al presidente Fernández en su visita.
«Los temas de infraestructura son muy importantes para nosotros. China está cooperando con Argentina y brindando apoyo financiero en proyectos de desarrollo relacionados con energía, ferrocarriles y energía nuclear», dijo el embajador Narvaja.
Como el octavo país más grande del mundo en términos de superficie terrestre, Argentina requiere una infraestructura significativa para sus exportaciones, crecimiento y desarrollo. Narvaja expresó su satisfacción por la firma del plan de cooperación para la construcción conjunta de la Iniciativa de la Franja y la Ruta con China.
Según la información publicada por la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma, el plan implementará plenamente el importante consenso alcanzado por los líderes de ambos países para promover el desarrollo de alta calidad de la iniciativa, y profundizará la colaboración en áreas que incluyen infraestructura, energía, economía y comercio, finanzas y cultura.
Dado que Argentina celebrará elecciones presidenciales en la primavera de este año, ¿cómo afectarán los resultados electorales y los cambios de gobierno a la relación entre China y Argentina y la actitud de Argentina hacia la Iniciativa de la Franja y la Ruta? En respuesta a esta pregunta, el embajador Narvaja dijo que la relación entre Argentina y China tiene una «estabilidad a largo plazo». Hizo hincapié en que, independientemente de los cambios de gobierno, la cooperación con China no retrocederá y la coordinación en el marco de la BRI se mantendrá sin cambios.
Citó ejemplos históricos de Argentina experimentando múltiples cambios de gobierno, incluyendo alternancias entre gobiernos de izquierda y de derecha, pero casi todos los proyectos de cooperación han continuado progresando.
«Independientemente de los cambios de gobierno, la Iniciativa de la Franja y la Ruta es un plan que beneficia a Argentina a nivel nacional y en diversos sectores, promoviendo el desarrollo nacional, el empleo y la inversión… Estos proyectos mejoran la vida de los argentinos y son independientes de los cambios de gobierno», señaló.
Durante la entrevista, el embajador Narvaja también discutió el tema candente del proceso de «desdolarización» que está ocurriendo en varias partes del mundo. Según informes de los medios, el Banco Popular de China renovó recientemente un acuerdo bilateral de intercambio de monedas con el Banco Central de Argentina. El acuerdo tiene un valor de 130 mil millones de yuanes (18,28 mil millones de dólares) o 4,5 billones de pesos argentinos, y tendrá una vigencia de tres años.
Los analistas creen que este intercambio de monedas brindará a Argentina más margen de maniobra para hacer frente a la venta masiva de pesos y aliviar la crisis de inflación del país. Para China, representa una oportunidad para acelerar la globalización del yuan y reducir la dependencia del dólar estadounidense.
Además, Argentina y su país vecino Brasil han expresado recientemente su intención de promover la liquidación del comercio bilateral en sus respectivas monedas y están comprometidos a lanzar una moneda común para la región sudamericana para reducir la dependencia del dólar estadounidense.
«Creo que el proceso de desdolarización es inevitable. El futuro de las economías emergentes radica en realizar transacciones utilizando sus propias monedas. Es beneficioso para nuestro comercio no depender de una única moneda», afirmó el embajador Narvaja al Global Times.
«Tomando a Argentina como ejemplo, nuestro socio comercial más importante es Brasil y el segundo más importante es China. ¿Por qué deberíamos comerciar con estos dos países utilizando una tercera moneda, el dólar estadounidense? Si podemos utilizar nuestra propia moneda, se reducirán los costos de servicios financieros y se fortalecerán nuestros sistemas fiscales y financieros», agregó.
El diplomático argentino afirmó que aprecia enormemente la propuesta del presidente brasileño Lula de una moneda común entre los países sudamericanos y una moneda común entre las naciones del BRICS. También apoya firmemente la internacionalización del yuan chino. «No estoy seguro de si las monedas comunes regionales o del BRICS se pueden lograr a corto plazo, pero a mediano y largo plazo, creo que es la dirección correcta», señaló.
Según un informe de The Economist en marzo, de 2007 a 2021 más de la mitad de los 62 préstamos otorgados por bancos comerciales chinos en América Latina fueron a Argentina. El comercio bilateral entre Argentina y China ha aumentado de 2.300 millones de dólares en 2001 a 26.000 millones de dólares el año pasado.
(Fuente: Global Times)
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