Macarena Radke, hermana de la joven asesinada en San Vicente, contó que se enteraron de lo que lo sucedido por la amiga de su hermana, quién dijo que la descripción de la mujer violada y luego asesinada, coincidía con las características de Daniela.
En una entrevista con los periodistas presentes, Macarena ha compartido cómo se enteró de la trágica noticia del fallecimiento de su hermana. «Estaba enfrente de la casa de mi mamá y quedé llorando porque llegó su Miguel allá y con 13:00 de la tarde diciendo que la descripción que habían dado de la mujer, porque por la mañana todavía no habían dado descripción, era Daniela, por el tatuaje del pescado y el tatuaje en la nuca, pero también por los piercings que tenía», explicó.
La joven ha destacado la necesidad de que se haga justicia en el caso y ha pedido a las autoridades que se investigue a fondo lo ocurrido. «En este momento lo único que se puede decir que somos fuertes, fuertes y firmes a lo que… no podemos decir que estamos bien porque ya sabemos que Daniela no va a volver, pero se tiene que hacer justicia, eh», dijo Macarena.
Los detalles sobre el caso aún no se han hecho públicos, pero la hermana de la víctima ha compartido que la mochila encontrada cerca del lugar del crimen pertenecía a Daniela y que había un teléfono con una foto de la joven dentro de ella. «Los vecinos se dieron cuenta que no era de ninguno de ellos y justamente dijeron que había un teléfono con la foto de ella como persona», reveló.
La multitud que se ha congregado en San Vicente ha mostrado su solidaridad con la familia de la víctima y ha pedido que se haga justicia por el crimen. Las autoridades continúan investigando el caso y se espera que pronto se conozcan más detalles sobre lo ocurrido.
La familia de Fiorella Aghem, quién tenía solo 20 años cuando fue brutalmente asesinada por Leopoldo Borovski, un hombre con el que había mantenido una relación amorosa durante tres años, mostraron su acompañamiento a la familia de Daniela.
Fiorella Aghem fue encontrada sin vida en su departamento de la ciudad de Córdoba, con la cara destrozada a golpes, varios cortes y un cable alrededor del cuello que evidenciaba la forma en que perdió la vida. La autopsia confirmó que Fiorella murió por asfixia, pero había algo más: la joven había escondido su teléfono celular entre sus partes íntimas, como si temiera que el agresor se lo pudiera quitar.
La Justicia actuó rápidamente y condenó a Borovski a perpetua por el femicidio de Fiorella. Pero a pesar de la contundencia de las pruebas, el asesino nunca pidió perdón. Incluso la madre de la joven aseguró que Borovski la llamó por teléfono desde la cárcel para decirle que «era una bestia».
Asimismo, la familia de Candela Correa de Melo, adolescente desaparecida hace 5 años en San Vicente, reclamó justicia por el femicidio de Daniela Radke.
El 3 de agosto se cumplirán cinco años desde la desaparición de Candela Correa de Melo, una adolescente de 15 años en ese momento. La joven salió de su hogar ubicado en el kilómetro 1274 de la ruta nacional 14, en San Vicente, pero nunca regresó. El último contacto que se tuvo con ella fue el sábado 3 de febrero de 2018, cuando supuestamente iría con su novio Carlos Da Silva a un asado en la casa de los padres del joven, quien tenía 19 años en ese momento. Sin embargo, Candela nunca apareció.
La madre de la menor contó que cuando iba a dormir, vio a su hija en el sillón enviando mensajes con su celular. Pero se quedó dormida y no escuchó el momento en que la adolescente salió de la casa ni tiene certezas sobre con quién se fue. Carlos Da Silva nunca la buscó y mantiene hasta hoy una coartada muy firme. Según su versión, él se encontraba en una reconocida pizzería céntrica de San Vicente junto con sus familiares, quienes le sirvieron como testigos, el día en que Candela desapareció.
A pesar de que el joven fue detenido e imputado, salió en libertad pocos días después debido a que nunca encontraron pruebas de peso en su contra. La Policía de Misiones realizó peritajes en el teléfono celular de Da Silva, pero solo encontraron mensajes y llamadas con Candela de días anteriores. El día de su desaparición, no hubo registro de que ambos se hayan contactado.
El domingo 4 de febrero a las 14:36 horas, tanto la madre como el padre de Candela recibieron el mismo mensaje copiado y pegado, en el que la joven supuestamente advertía que no se fue con Carlos, que quería irse lejos para tener su bebé. Esta situación sembró la duda en la mente de sus allegados sobre si Candela estaba embarazada. El padre de la menor, Pablo Correa de Melo, dialogó con Misiones Online y recordó algunos llamados que habría tenido con su hija, quien le decía en tono de «joda» que «le iba a hacer abuelo», pero concluían con ese tema.
Candela era hija de padres separados y vivía con su madre, Nilda Galeano, mientras que su padre residía en la Provincia de Buenos Aires. Pablo Correa de Melo llegó a San Vicente el jueves 8 de febrero de 2018 y se dirigió a la Comisaría de la Mujer donde su expareja había radicado la denuncia para ampliar su declaración por la búsqueda de Candela. Nilda Galeano realizó una exposición pocas horas después de no tener noticias de su hija y radicó la correspondiente denuncia por su desaparición 48 horas después.
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