Cuando el dolor se transforma en amor: la familia del profesor Julio Zurco inauguró un merendero en su honor en Candelaria

El 17 de Agosto del 2019 es una fecha que la familia de Julio Zurco jamás olvidará. Ese día, el facilitador técnico informático posadeño,  perdía la vida en un accidente de tránsito por la ruta nacional 12 camino a una jornada de la Liga de Robótica en la provincia de Chaco.

Hoy, a casi un año de esa tragedia, toda la familia decidió poner en marcha un merendero en Candelaria. El emprendimiento familiar lleva el nombre de “El Cracky” en homenaje a “Julitto” y funciona los días sábados a partir de las 16 hs en el barrio 5 de Abril de esa localidad, Casa “C” 4.

 

Pionero en lo que amaba: trazando caminos hacia la vanguardia robótica

 

Ofelia Centurión y Orlando Zurco están juntos hace 40 años. Criaron 5 hijos: Natalia, Jenifer, Tato, César y Julitto.

Julio, apodado  “El Cracky” era el menor de todos los hermanos.

Con sus juveniles 26 años supo ganarse el amor y la amistad de todos los que lo rodeaban. “ Era amigo de todos, de jóvenes, grandes, niños”, en su corazón solo había amor para dar”, expresa Ofelia, su madre.

Julitto comenzó a dar sus primeros pasos casi en el mismo momento que surgió el proyecto Conectar Igualdad en la provincia. Con sus 21 años empezó a transitar el camino de la informática y robótica, con toda la pasión que siempre lo caracterizó.

Fue así, que sus pasos dejaron huella firme en todo lo que se proponía hacer y por ello se transformó en un facilitador técnico de experiencia en su rubro, a pesar de su corta edad.

En su trayectoria dentro de la Escuela de Robótica Julitto, tuvo varios roles y funciones, siempre pionero en lo que amaba hacer. Fue FTE (Facilitador Técnico de Escuela),  luego RTZ (Referente Técnico Zonal), y ETJ (Encargado Técnico Jurisdiccional) función que cumplía al momento del accidente.

 

El amor por la  vida y un sueño por cumplir

Julitto era una persona que todos amaban, querían y respetaban.

Era un ser de luz, lleno de amor para dar, que irradiaba energía positiva. Siempre nos decía “que bueno sería poder hacer algo para los niños, que tengan un espacio para disfrutar, para la recreación”, cuenta Ofelia.

Transitar el camino del duelo y la pérdida de un hijo es un hecho que te marca para siempre y es sin dudas una de las peores experiencias del ser humano.

 “Hubo un antes y un después muy doloroso desde la muerte de Julio”, lo extrañamos todos los días,  expresa Ofelia.

Siempre fue muy solidario y respetuoso por la vida, con buenos valores y todos quienes tuvieron el placer de conocerlo, coincidían en describirlo con estas características.

‘Siempre estaba pensando en cómo ayudar al otro”. Desde esa faceta empática que lo caracterizaba como tal, se transformó en referente de la Escuela de Robótica en poco tiempo.

 

 

Con su mamá Ofelia

 

 

La despedida y un mensaje

 

El día anterior al accidente, fuimos a saludar a Julitto, como de costumbre. “Nos pidió la bendición y nos dijo que nos amaba mucho. “Sos la mejor mamá del mundo”  Siempre recordamos este mensaje, fue la última vez que lo abrazamos fuerte”, recuerda Ofelia emocionada.

Julio era una persona que amaba a su familia, “nos abrazaba a todos, siempre pendiente de sus afectos, de sus hermanos, sobrinos. “Nos juntaba a la familia entera,  a los amigos,  agasajaba a la vida de manera constante”, relata Ofelia.

 

 

Julitto con sus padres

 

El merendero y hacer a los niños felices: el sueño de Julitto

 

El emprendimiento familiar arrancó hace casi un mes. Con ayuda de toda la familia que se unió para llevar adelante el sueño de julio, comenzó a funcionar todos los sábados a partir de las 16 en el barrio 5 de Abril de Candelaria.

El primer sábado asistieron 108 personas, el segundo 122 y el último sábado 170. Vienen los niños con sus familias, y por la pandemia, no se quedan a merendar. Les damos la leche, chocolatada, facturas y llevan una sorpresita con chupetines, alfajores, caramelos, cuenta Ofelia.

 

Las familias que se acercan al merendero llegan de barrios cercanos al 5 de Abril de Candelaria, Los Teros, Padre Mujica y 13 de Julio entre otros.

“Ver esos rostros de felicidad y poder, desde nuestro espacio ayudar a los que más necesitan nos conecta con el sueño que tenía Julitto.”.

 

La idea es hacer crecer el emprendimiento. En las últimas semanas también pusimos a disposición, y con las constantes donaciones que llegan, ropas, calzados, frazadas ya que muchos de los asistentes no tienen abrigos. Toda la familia está comprometida con este proyecto, en este emprendimiento que nos acerca aún más a Julitto, nos conecta desde otro lado con él,  con lo que el quería hacer, con su sueño y sin dudas también podemos dar amor, el mismo amor que el transmitió a lo largo de toda su vida,  y ayudar a quienes más necesitan, tal como el lo hubiera planeado.

“Indudablemente nuestro Julitto estaría feliz de ver realizado este sueño” y sabemos que sábado a sábado el nos guia desde su lugar para llevar adelante el merendero y poder devolver un poco de todo el amor que el nos dio”, finaliza Ofelia.

 

 

 

Homenajes y placas en su honor

 

Son numerosos los homenajes que al momento le hicieron a Julio Zurco.

 

Por un lado, hay una placa en el Cep 4 de Posadas con su nombre y una frase de despedida que él mismo redactó cuando se recibió en 5to año.

Además, los integrantes de la Selección Misionera de la Escuela de Robótica nombraron a su robot «Julito», que les sirvió para salir campeones a nivel nacional en la «Copa Robótica 2019» y representar al país en el certamen «First Global Challenge», que se llevó a cabo en Dubai, Emiratos Árabes Unidos.

Por otro lado, desde la Liga Nacional de Robótica decidieron nombrar a la jornada final «Julio Zurco» por su entrega en las jornadas realizadas en distintas provincias del país.

 

 

 

Julio Zurco amaba su profesión

 

La resiliencia y el proceso de transformar el dolor en amor:

La resiliencia es un  proceso paulatino, es esa capacidad de adaptarse a una nueva realidad luego de una pérdida de una persona cercana, familiar- ser querido. Es comenzar a transformar el dolor en algún lazo de amor.

“ La energía de toda la familia de nuestro Julitto está puesta en este merendero. Yo siento que todos los sábados él está presente, está con y en  nosotros, entre los niños, en esos rostros de felicidad, de cariño y de amor”. finaliza Ofelia.

 

 

Donaciones y ayuda:

Para donar alimentos no perecederos, ropa y todo lo necesario para el proyecto solidario los interesados se pueden comunicar al contacto 3764 666955 (Natalia Zurco)

 

 

A. C

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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