La joven Noelia Mareco terminó en terapia intensiva luego de una competencia de fitness en Apóstoles cuando padeció un severo cuadro de deshidratación. Descubrió que su profesor era un falso entrenador y que las razones de la hemorragia cerebral habrían sido por las recomendaciones que le brindó su preparador físico, propietario de un gimnasio ubicado por calle La Rioja del microcentro posadeño. Tras conocerse su caso, la deportista dijo que al menos unas 13 chicas se comunicaron para contar que pasaron por situaciones similares con la misma persona.
Noelia Mareco. Radio Libertad.
Noelia Mareco es competidora fitness desde 2017 y en los últimos meses sufrió una descompensación en medio de un evento desarrollado en Apóstoles. A pesar de sentirse mal, decidió continuar y compitió. Al finalizar, tuvo que ser hospitalizada por un cuadro de deshidratación que más tarde le informaron se trató de una hemorragia cerebral.
La joven manifestó que desde mediados de octubre debió hacer reposo en su casa debido a que tenía fiebre, vómitos y dificultades para valerse por sí misma. Le hicieron una resonancia para determinar su estado de salud y afortunadamente no requirió de cirugías, pero todo indica que los causantes fueron los suplementos que le recetaba su profesor, un falso entrenador que ni siquiera le pidió informes médicos.
Aseguró que los quemadores de grasa no son malos, pero que la persona que se los administraba lo hacía en dosis altas que evidentemente le alteraron el organismo. Contó que inclusive tuvo problemas de coagulación y que, a pesar de ello, el entrenador le aumentaba las dosis a medida que se acercaba la fecha de competición.
En cuanto al sujeto, sostuvo que no se hizo cargo de lo ocurrido. Luego de que compartiera lo que le había pasado, Mareco precisó que alrededor de 13 jóvenes más, del mismo gimnasio, se comunicaron con ella para decirle que habían atravesado por la misma situación.
La deportista dijo que confió en su preparador ya que su gimnasio es conocido y tiene en su haber muchos campeones, «entonces pensé que algo sabía y él decía que era conocedor del tema», manifestó sobre las razones por la cual aceptó las condiciones que le daba su entrenador. «Hago esto para evitar que otras chicas pasen por lo mismo. Muchas quieren llegar al verano con el cuerpo perfecto y es importante medir las consecuencias», advirtió. Contó además que el propietario del gimnasio ubicado por calle La Rioja es quien prepara a las deportistas, receta y vende las pastillas en el lugar.
La competidora dijo que tiene pensado denunciar al falso entrenador ante la Justicia, aunque asegura que las demás personas afectadas no quieren hablar debido a que el sujeto es abogado y temen que éste pueda salirse con la suya.
DL
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