Pericias con resultado inducido

Si los guionistas de la serie yanqui Escena del Crimen (CSI por sus siglas en inglés) tomaron conocimiento de las últimas novedades del caso Nisman, deben esta verdes de envidia por no habérseles ocurrido a ellos tan intrincada trama.

El jueves por la tarde el portal de internet porteño Infobae publica una información en la que asegura que “La pericia de Gendarmería determinó que Alberto Nisman fue asesinado a sangre fría”. Inmediatamente, la versión digitan del diario Clarín, toma la nota de Infobae y la publica destacando que lo había adelantado ése diario en el mes de mayo, cuando aún ni siquiera se había iniciado el peritaje por parte de Gendarmería.

La nota publicada por Clarín el 28/05/2017 se titulaba “Nuevas pericias oficiales sostendrán que a Nisman lo asesinaron” y destacaba que, “La información fue confirmada a Clarín por dos fuentes judiciales, una del Gobierno, una relacionada con organismos de inteligencia y otra de la comunidad judía. La presentación del informe de Gendarmería al juez federal Julián Ercolini aún no tiene fecha, pero se estima que se produciría dentro de los próximos 30 días”.

El gran interrogante que surge y desafía la capacidad de raciocinio del más lúcido investigador es, como sabían las fuentes que cita Clarín en mayo el resultado de las pericias, que (en eso falló el adelanto de la nota) no fue presentada en los 30 días supuestos si no que se tomaron casi cuatro meses para decir exactamente lo que ya sabían fuentes judiciales, del Gobierno, organismos de inteligencia y de la comunidad judía.

Por su parte la Gendarmería, ante la “filtración” de la información publicada por Infobae el jueves, publicó inmediatamente un comunicado indicando que hasta el momento no emitió ningún informe final de las pericias, «Gendarmería Nacional informa que, a la fecha, la Dirección de Criminalística y Estudios Forenses de la Institución no produjo ningún informe final conclusivo en el marco de la junta interdisciplinaria respecto a las pericias del denominado mediáticamente ‘caso Nisman'», indicó en el texto y agregó que, «al momento de arribar a conclusiones periciales finales, éstas serán presentadas ante las autoridades judiciales pertinentes para su consideración».

 

Otro dato que resulta si no sospechoso, al menos llama la atención es que a dos años de haberse realizado la autopsia aparece, por primera vez, la sustancia ketamina en el hígado de Nisman, lo que lleva a que de acuerdo a la postura del perito que la analiza a varias teorías, hipótesis, conclusiones y afirmaciones.

 

No se pretende acá llegar a una conclusión ni alentar ninguna hipótesis de quien disparó el arma que mató a Natalio Alberto Nisman, aquel 18 de enero de 2015, lo que llama la atención es que una causa que involucra a un fiscal federal sea tan manoseada y tratada con tanta liviandad por parte de el mismo Poder Judicial de la Nación y quienes de una forma u otra intervienen en lo que debería ser una investigación con cierto rigor científico. Es lo menos que espera el “ciudadano común” (al decir del presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Ricardo Lorenzetti) del servicio de justicia al que en algún momento podría tener la necesidad de recurrir.

Emilio Juri

 

LA REGION

NACIONALES

INTERNACIONALES

ULTIMAS NOTICIAS

Newsletter

Columnas