Insumos y equipos de los que dependen las prestatarias eléctricas aumentaron hasta 500% por la devaluación y la desregulación del gobierno de Milei

Un transformador de 44 MVA pasó de valer 477 millones a 2.534 millones de pesos, lo que representa una variación de más de 530%. Medidores, columnas de hormigón y cables aumentaron entre 200% y 350%.

Las primeras medidas dispuestas por el nuevo Gobierno nacional tuvieron un impacto directo en todos los precios, pero en algunos rubros los aumentos fueron mucho más pronunciados que en otros.

Animados por los aires desreguladores que impuso el Gobierno de Milei y por el clima de incertidumbre que impera en la economía nacional, proveedores de los principales insumos y materiales de los que dependen las prestatarias eléctricas, dispusieron aumentos de precios que en algunos casos llegan hasta el 500%.

Cables, transformadores, materiales aislantes, refrigerantes, elementos de protección, todo aumentó (incluso medido en dólares) en porcentajes tan abultados como injustificados.

Un metro de cable preensamblado de aluminio pasó de 12 mil a 29 mil pesos; un medidor trifásico, de 47 mil a 143 mil pesos; uno monofásico, de 8.700 a 26.500; pero lo que más aumentó fueron los transformadores, dependiendo del voltaje en el que operan sus precios se incrementaron entre 320% y 530%.

Un transformador de alta tensión pasó de 477 millones de pesos a 2.534 millones de pesos, más de 2,5 millones de dólares.

Un elemento tan básico para la prestación del servicio eléctrico como un poste de hormigón, hoy vale casi un millón de pesos.

El aumentazo se sintió de manera directa en los costos de las prestatarias, que enfrentan serias dificultades para reponer elementos que quedan fuera de servicios porque se cumplió su vida útil o por causa de alguna tormenta.

Invertir para ampliar o mejorar el servicio en estas condiciones es poco menos que una utopía.