La representación de “Canto al Libertador” en el Montoya atrajo a una multitud: “Es un aporte muy importante”, sostuvo Cacho Bernal

El pasado martes se realizó en el Auditórium Montoya de Posadas una representación de la clásica obra musical “Canto al Libertador”, escrita por el misionero Fermín Fierro. El evento tuvo entrada libre y gratuita, y contó con la presencia del gobernador de Misiones, Oscar Herrera Ahuad. En el escenario estuvo Cacho Bernal, que destacó la importancia de rescatar la obra de personas como Fierro.

Cacho Bernal – Radio Libertad

“Para muchos, especialmente los jóvenes, Fermín Fierro es un desconocido”, afirmó Bernal en diálogo con Radio Libertad. “Canto al Libertador” es una obra conceptual, algo inusual en el panorama actual y en una industria musical que cada vez hace más hincapié en la comercialización de sencillos antes que álbumes. Fue compuesta en 1968, pero recién incluida en un disco un año después. “Por suerte la registraron en un disco”, sostuvo Bernal, un histórico percusionista de la región.

En el tiempo en que salió a la luz por primera vez, los proyectos musicales de carácter conceptual eran más comunes que ahora, pues la venta física de discos de vinilo daba la posibilidad de presentar una obra mucho más larga que una sola canción (uno de los ejemplos universales más reconocidos es “The Wall”, lanzado por Pink Floyd diez años después de la obra de Fierro). “Tiene que ver con esa época, eran otros tiempos”, reflexionó el percusionista.

“La edición de un material así requiere también de un tiempo, del escuchar y el pensar para que quede algo”, manifestó. Por esa razón, dijo, el material de Fierro es un “aporte muy importante”, a pesar de haber muchas obras que tocan el mismo tema. “Hay muchas obras que hablan sobre San Martín, pero cómo aborda Fierro la temática es muy interesante. Lo hace desde muchos puntos de vista”, aseveró.

Para contar la historia, la obra se apoya en diferentes géneros musicales autóctonos de Argentina, que se fusionan y ponen al servicio de la narrativa. “Ayudan a entender la historia, no sólo con la poesía, sino con la música de esa geografía en el país”, explicó Bernal. Entre los géneros incluidos están la chacarera, el vals peruano, y el chamamé. “Todo eso ayuda a que uno, además de meterse en la obra, se pueda contextualizar sonoramente con las etapas de la vida de San Martín”, indicó.

En retrospectiva, el reconocido percusionista agradece que existió la posibilidad de grabar esa música en un disco y conservarla en mejores condiciones para la posteridad, algo que sucedió gracias a una colisión afortunada entre viabilidad económica y expresión artística. “Y encima con artistas muy capos y conocidos en ese momento”, sostuvo el músico. Esto hace que sea “una alegría” volver a escucharla y ser testigo del renovado interés, agregó.

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La convocatoria que atrajo la propuesta le cayó de sorpresa a Bernal. Con el auditórium lleno, los asistentes comprobaron la existencia de la “complicidad” entre artista y audiencia que, para Bernal, es absolutamente necesaria para el éxito de cualquier obra. “Si esa química sucede, parece que todo suena mejor. A nosotros nos pareció eso: que fue todo muy natural y todos disfrutamos. Se ve que había una necesidad de escucharla”, afirmó. Con una duración aproximada de 45 minutos, la duración aportó también al desarrollo de esta «química».

Gracias a ese éxito es que se comenzó a considerar volver a poner la obra en escena, pero de acuerdo con Bernal todavía no hay nada pensado con seguridad. “Hay una idea, pero siempre poner una obra de estas requiere de un apoyo. En este caso, el Ministerio de Cultura de la provincia hizo ese sostén. Hay diez personas en el escenario más toda la parte técnica”, sostuvo, haciendo referencia a la capacidad de personal requerida.

A pesar de todo, todavía ve la necesidad de repetir la presentación con tal de mantener vivo el recuerdo de Fermín Fierro. “Nosotros abogamos a que se la ponga muchas veces, porque está bueno valorar, primero a San Martín, y también para que se puedan replicar cosas similares”, explicó. Este tipo de representaciones, dijo, sirven de “disparadores” para que artistas en potencia creen algo similar.

La representación del pasado martes, por ejemplo, incluye una nueva canción final no incluida en la versión original. Según Bernal, este es un ejemplo de la evolución que es posible gracias a esos disparadores. Describió la nueva canción como “un gualambao que deriva en una galopa”, al mismo tiempo que reiteró su compromiso con el valor de la obra: “es un homenaje a San Martín y a la obra de un compositor misionero”, manifestó.

El músico se mostró complacido con la posibilidad de una posible presentación en el Festival del Litoral. “Sería una hermosura para todos, porque hay mucha gente que no la vio, que no sabe, o que no pudo venir”, sostuvo, agradeciendo a los demás artistas que aparecieron en escena junto a él. “Fue algo fantástico no solamente en lo musical, sino en lo personal. Sonó hermoso porque había una energía muy positiva y linda”, aseveró.

La obra contó con la participación en el escenario de Mario Pereyra, Cacho Bernal, Patricia Silvero, Osvaldo de la Fuente, y José Fernández. Además del gobernador, también asistieron el intendente de Posadas, Leonardo “Lalo” Stelatto; el vicegobernador, Carlos Arce; el ministro de Gobierno, Marcelo Pérez; el ministro de Turismo, José María Arrúa; el ministro de Cultura, José Martín Schuap; la ministra de Trabajo, Silvana Giménez; y los diputados provinciales Hugo Passalacqua y Martín Cesino.

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