El Puerto de Posadas y la logística

Desde hace tiempo se puede observar como países vecinos emplean el mismo rio que pasa frente al territorio de Misiones como vía de transporte, de la misma manera que se habla sobre la necesidad por parte de nuestra provincia de contar con un puerto con el objeto de mejorar su desempeño logístico.

 

 

Por lo tanto y como se analizará en el artículo, no se puede considerar el impacto del puerto de manera separada de la logística. En la economía actual, las actividades se organizan en cadenas de suministro (supply chain). En consecuencia, la logística, entendida como el proceso que asegura la entrega de productos y servicios al cliente en el momento oportuno, con la calidad exigida y al precio que está dispuesto a pagar, pasa a desempeñar un rol clave en el funcionamiento óptimo de dicha cadena.

 

De acuerdo con índices internacionales, la performance de los países de nuestra región presenta un importante rezago en materia logística a pesar de los claros beneficios que se podrían obtener con solamente algunas mejoras en su desempeño. Según estimaciones, si la calidad de los servicios logísticos de un país mejora en una unidad (en una escala de 1 a 5), sus exportaciones se incrementarían en alrededor del 7%. Los beneficios pueden llegar a ser incluso mayores dependiendo del sector económico que se analice. Asimismo, y de acuerdo a otras fuentes consultadas, cada día adicional de transporte reduce aproximadamente un 1,5% la posibilidad de que un país exporte a USA y cada día de retraso en el envío de un producto reduce el comercio en al menos 1% (6% en el caso de productos perecederos).

 

Vale aclarar que la matriz logística de Argentina se caracteriza por el predominio del transporte terrestre de mercancías en detrimento de los otros modos. Asimismo, la mayor inversión pública en infraestructura (caminos, autopistas, etc.) ha ido acentuando dicha tendencia con los años.

 

En cuanto al transporte acuático, presenta oportunidades de negocio a los que se sitúan como hub (centro) portuarios dentro de las rutas comerciales. Además, dicho medio es clave para la inserción internacional de nuestro país debido a la particular distancia geográfica que separa nuestro país de los principales centros de consumo. En tal sentido, existen algunos retos principales que el sector debe resolver para incrementar su desempeño en al región: 1) el bajo desempeño portuario respecto a best performers internacionales, incluso regionales 2) la limitada intermodali¬dad (combinación de modos de transporte) en la región 3) escaso desarrollo del transporte fluvial pese a su enorme potencial.

 

Actualmente el nuevo Puerto de Posadas se encuentra habilitado por el Poder Ejecutivo Nacional, AFIP y demás organismos nacionales competentes, cumpliendo con los requerimientos administrativos, jurídicos y de infraestructura para poder operar, teniendo en cuenta que el mismo ha sido proyectado como un puerto estilo “multipropósito”, es decir,  no especializado en trabajar con una determinada categoría de productos sino que puede manejar diferentes tipos de cargas. Esto significa, desde punto de vista formal, que estaría en condiciones de poder operar sin inconvenientes. ¿Qué estaría faltando entonces? ¿Decisión política? ¿Operador? ¿Cargas? Para poder dar una respuesta se deben tener presente algunas cuestiones. En primer lugar, no se puede dejar de mencionar que el sector público cumple un rol importante para el desarrollo portuario, siendo proveedor de 3 elementos indispensables: I) marco normativo II) infraestructura y III) servicios públicos. Claro que para que  pueda cumplir con su cometido de manera correcta, es necesario que lo haga con una visión estratégica para que el proyecto tenga el resultado esperado. En cuanto al aspecto legislativo,  la ley de reserva de cargas que, con el propósito de promover el desarrollo de la flota nacional, impone la obligación de emplear únicamente buques de bandera nacional parecería a todas luces una exigencia exagerada en medio de una disputa con Paraguay por su ley de reserva de cargas, por lo tanto, exigir a otra nación el derogamiento de una norma sancionando una norma similar no sería la estrategia adecuada para conseguir el cometido.

 

Asimismo, se percibe un interés por parte del gobierno proporcionando infraestructura pese a que aún quedan  importantes obras pendientes por ejemplo, en materia de dragado, mantenimiento y balizamiento fluvial, etc. más aun en situaciones como la actual crisis hídrica que a la fecha no pudo ser completamente superada.

 

Por último, en cuanto al operador logístico y los dadores de cargas ambos aspectos van de la mano.  El puerto de posadas debe convertirse en un hub no solo de cargas misioneras sino de regiones cercanas (Sur de Brasil, Paraguay etc.) para lo cual es necesario ofrecer tarifas y servicios competitivos en comparación con otras opciones actualmente disponibles, sin dejar de tener en cuenta otros beneficios muchas veces incorrectamente ponderados como ser la descongestión de rutas y su impacto ambiental.

Por Ernesto Seidel (*)

(*) El autor es Despachante de Aduana, Agente Marítimo, Agente de Transporte Aduanero y Licenciado en Comercio Internacional.  e-mail: [email protected]

Además...

ULTIMAS NOTICIAS

Columnas