Las historias insólitas no sólo se viralizan en tiempos de redes sociales, sino que también lo hacían hace 30 años. En el barrio porteño de Caballito, un caniche cayó de un piso 13 y mató a tres personas, un hecho trágico que vale la pena recordar.
El 21 de octubre de 1988, por la esquina de la avenida Rivadavia y calle Morelos circulaba gente como cualquier día. Nadie se imaginó que ese día tres muertes sucederían con segundos de diferencia y todas causadas por un pequeño perro llamado “Cachy”.
Los diarios de la época, incluso lo publicó la agencia Reuters, relatan que Marta Espina, de 75 años, caminaba por la zona con su bolsa de compras. Mientras iba por el frente de una casa de alfombras, “Cachy” jugaba en el balcón del piso 13 del departamento de sus dueños, de apellido Montoya.
A tres décadas, nadie encuentra lógica a lo que vino después. El caniche atravesó un hueco de la baranda y cayó al vacío, directamente sobre la cabeza de la anciana, quien falleció en el acto. Lamentablemente, “Cachy” también perdió la vida.
La consecución de hechos fatídicos incluyó a otras dos personas. Edith Solá, de 46 años, cruzó apresuradamente la avenida Rivadavia para ver qué sucedió del otro lado, pero no miró a ambos lados y murió atropellada por un micro de la línea 55 que circulaba por allí.
En tanto, la tercera víctima fatal fue un hombre que sufrió un ataque al corazón y falleció mientras era llevado al hospital. Otro testigo del insólito hecho que perdió la vida y copó las crónicas de la época.
Fuente: Los Andes
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