“Le pido a Dios misericordia y que le deje a Cristian conmigo porque es muy triste perder a la familia en 20 minutos. No entiendo la saña», fueron las sentidas palabras del joven que perdió a su madre, su padre, a su hermana y pide por la salud de su hermano que está grave, con el 97 por ciento del cuerpo quemado.
El joven de 20 años es uno de los tres hijos de la familia Knack que el domingo fue víctima de un robo donde además incendiaron a los cuatro integrantes -padre (43), madre (42), hija (12) y hermano (25)-.
Cristian reveló algunos detalles desgarradores sobre el momento cuando encontró a toda su familia quemada. «No hay palabras para describir lo que hicieron, destruyeron mi familia. Pido que las autoridades me protejan y que se haga justicia», señaló.
Dijo que cuando llegó a su casa los cuatro estaban tirados en el pasto, “todos quemados y gritando de dolor. Los golpearon con una barreta».
Narró además, que «por la desesperación mi padre no encontraba el portón y se trepó a la reja donde quedaron sus dedos y pedazos de piel. Los cuatro hablaron».
Aseguró que todo lo que tienen es con el sudor de la familia. Indicó que se llevaron una suma de dinero y un arma de fuego, que luego la tiraron.
