En el marco del programa de apoyo a las cuencas lecheras del Alto Uruguay misionero, el pasado martes llegaron 100 vaquillas Holando Argentino con el propósito de adaptarlas y prepararlas, para luego entregarlas productores de las tres cooperativas que trabajan con la producción lácteas, en el contexto del Programa Proalimentos.
De acuerdo a lo que explicó el Director General de Producción Animal del Ministerio del Agro y la Producción, Virginio Luis Ruffini, los lotes comprados permanecerán en la chacra de un productor de 25 de Mayo por el lapso de 100 días. Las entregas a los productores se harán según lo acordado en la “Mesa lechera provincial”, que se desarrolla con técnicos y representantes de las cooperativas de la cuenca.
Durante ese tiempo, las vaquillas serán alimentadas y controladas sanitariamente. Antes de ser llevadas a los campos de las cooperativas beneficiarias, serán preñadas mediante el sistema de inseminación artificial.
“La idea es que en entre 100 y 120 días estos animales entren en servicio y puedan ser entregados a productores las Cooperativas El Progreso, Sarandí y la Caul”, sostuvo el médico veterinario.
Al referirse al programa de desarrollo de la cuenca lechera, Ruffini señaló que la Provincia “tiene que incorporar genética de calidad lechera para garantizar el proyecto. Con la inseminación artificial se trabajará en el armado de una base de animal de cría pura”, dijo.
El funcionario de Ministerio del Agro agregó que con el nuevo lote Holando Argentino el productor “podrá incrementar el rendimiento, es decir en la cantidad de litros de leche. Estos animales están dando entre 15 y 22 litros de leche por día. Comparativamente con nuestros animales, que están en un promedio de 8 litros diarios, es un cambio muy bueno en cuanto al volumen”, finalizó
La selección de animales estuvo a cargo de profesionales de la cartera agraria, entre ellos Director de Especies no Tradicionales, Ricardo Spachuk, quienes viajaron a Rafaela, Santa Fe y Saenza Peña, Chaco. Las vaquillas provienen de Rafaela, una de las cuencas madres de la lechería argentina. Luego fueron a un campo de la localidad chaqueña, con la edad de 4 a 8 meses, donde se premunizaron y recriaron a campo para adaptarlas al clima y “rustificarlas”, por el periodo de dos años.
“Ahora, con dos años y medio ingresan a nuestra provincia como pie de cría de los tambos de la cuenca lechera con una genética de alta calidad, para lograr no solo cantidad sino calidad de leche” explicó Spachuk. Los animales cuentan con certificación sanitaria libres de brucelosis y tuberculosis. También fueron premunizados contra la “tristeza bovina”, piroplasmosis y anaplasmosis, lo que garantiza una buena adaptación a la zona. Además cuentan con vacunas preventivas contra enfermedades virales, clostridiales y enfermedades reproductivas. “Estos tratamientos garantizan la eficiencia en el trabajo de inseminación”, indicó el veterinario. También destacó que las vaquillas “serán inseminadas a tiempo fijo con pajuelas sexadas jersey, así garantizar nacimientos de terneras, como futuras madres”. En el transcuros de los próximos cien días serán controladas y alimentadas en campos con pasturas y dietas balanceadas a base de silo y ración.
