Walter Villalba, gerente asistencial del hospital Madariaga, explicó que Lucas fue atendido a los 12 minutos de haber recibido el impacto, pese a ellos fueron nulos los esfuerzos por salvarle la vida. “Una lesión así es irreparable”. Relató que la bala no tuvo orificio de salida y que la lesión era muy profunda. A las 22:15 horas de ayer declararon que tenía muerte cerebral.
Walter Villalba, gerente asistencial del hospital Madariaga