La Municipalidad de Posadas clausuró las 17 habitaciones del «Rotonda Motel». Los controles comenzaron ayer y se llevarán a cabo hasta el lunes.
El año pasado se clausuraron cuatro moteles por falta de higiene y seguridad.
[su_note note_color=»#cdcdcd»]Propietarios denunciaron la existencia de habitaciones particulares que no tienen habilitación.[/su_note]Al menos quince minutos tuvieron que esperar los inspectores de la Municipalidad para colocar la faja de «clausura» en 17 habitaciones de un motel de la ciudad de Posadas. Es que dos estaban ocupadas por un par de parejas, quienes no se dieron por enteradas que entre ayer y hasta el lunes se llevarán a cabo controles de higiene y seguridad en los albergues transitorios.
Terminó su turno y salieron en sus respectivos coches. Recién después de su partida, los municipales procedieron a controlar el «Rotonda Motel» -ubicado en las afueras de la ciudad- y ante las falencias detectadas en materia de higiene clausuraron todos los cuartos de alquiler.
«Además de que no tenía verificación municipal, la higiene era muy mala, las habitaciones parecían un basural», señaló Jorge Jaborniski, director de Salud y Medio Ambiente Urbano, quien junto a Daniel Otazú, director de Comercio, realizan los controles que continuarán hoy.
«Levantamos el colchón y había papeles, algodón, basura en general, realmente era un desastre. Había dos habitaciones ocupadas y tuvieron que retirarse para poner la faja de clausura en la puerta, nosotros esperamos afuera», relató el médico. Inmediatamente labraron un acta de infracción cuya multa queda a disposición de lo que dictamine el Tribunal de Faltas.
También le faltaba cuerina a los colchones -continuó Jaborniski-, indispensable para mantener el espacio limpio. Entre otros puntos, controlaron si el stock de la ropa de cama coincidía con el número de habitaciones.
Resultados
Ese fue el resultado del operativo realizado ayer: de cinco moteles observados uno fue clausurado. En ese sentido, la falta de medidas de seguridad fue la principal irregularidad detectada.
En estos casos, la Municipalidad le cede un plazo de entre cinco y diez días para regularizar su situación.
Ya a fines del año pasado se ejecutó un operativo similar que cerró cuatro moteles y entre ellos se encontraba el «Rotonda Motel».
Los cuidados sanitarios son de fundamental importancia en este tipo de locales dada la expansión de las enfermedades de transmisión sexual, el contagio de hongos, y otras afecciones.
Si bien existe un registro de 21 albergues en la ciudad Capital, el funcionario aseguró que solo doce están funcionando actualmente y en los últimos dos días ya se inspeccionaron nueve.
Mientras realizaban el operativo los propietarios denunciaron la existencia de habitaciones «truchas», es decir, casas particulares que alquilan por hora sus habitaciones y no tienen habilitación municipal.
«Este será el próximo punto a indagar, recibimos información de que esos lugares están por la avenida Uruguay y la única manera de detectarlos es con controles nocturnos», señaló.
