Misiones recuperaría por lo menos 500 de los 1.200 millones de pesos que cada año se iban en el comercio fronterizo

La flexibilización de los controles aduaneros, los incentivos al sector industrial y la continuidad del ITC diferenciado asoman como las herramientas imprescindibles. Desde la Subsecretaría de Comercio Exterior e Integración afirman que la devaluación ya produjo efectos positivos en la provincia. [su_note note_color=»#cdcdcd»]"Hay datos positivos. Tenemos una arrocera de Gobernador Virasoro (Corrientes) que pasó de vendía 4 toneladas mensuales a una cadena local de supermercados, la que ahora le pidió 12 toneladas. No sólo se recuperó el mercado interno, sino que vienen paragu[/su_note]Si el sector privado y los organismos estatales involucrados consiguen aunar esfuerzos y sacar provecho de la devaluación, la economía de Misiones podría recuperar -como mínimo- la mitad de los 1.000 a 1.200 millones de pesos que anualmente se escaparon hacia Brasil y Paraguay durante la última década, estimó el subsecretario de Comercio Exterior e Integración, Abel Motte. Según los cálculos efectuados, solamente por el puente Posadas – Encarnación cada año ingresaban 700 millones de pesos en moneda nacional que se cambiaban en el sistema financiero local. A ese monto se sumaban las compras con tarjeta de crédito y en moneda extranjera que hacían los argentinos en todos los pasos de la costa de los ríos Paraná y Uruguay, la frontera seca de Bernardo de Irigoyen y el puente Tancredo Neves que une a Puerto Iguazú con la ciudad brasileña de Foz de Iguazú. «Superaríamos ampliamente los mil millones. Recuperar el mercado interno es positivo, pero tendríamos que sumar el consumo de Paraguay y Brasil en nuestro mercado. No puedo estimar el dinero, pero si puedo decir que a nivel provincial no bajaría de los 500 millones de pesos al año», subrayó. Pero las asimetría que ahora crean un marco competitivo para el comercio, la producción y la industria requiere de herramientas concretas para que los resultados aparezcan. La flexibilización de los controles aduaneros, los incentivos al sector industrial y la continuidad del ITC diferenciado asoman como esos elementos imprescindibles. En ese sentido, el primer paso fue dado por Aduanas, que junto a Gendarmería Nacional y la AFIP ya flexibilizan los controles fronterizos para favorecer la venta de productos argentinos -y sobre todo misioneros- en los países fronterizos. El requisito exigido es la factura de compra, instrumento que sirve para evitar la evasión fiscal y que la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) pueda ir a los comercios a corroborar los montos de las ventas, además de mejorar su recaudación. «DATOS POSITIVOS» En diálogo con esta agencia, Motte aseguró que los efectos de la reactivación del consumo ya se manifiestan en algunos rubros. «Hay datos positivos. Tenemos una arrocera de Gobernador Virasoro (Corrientes) que pasó de vendía 4 toneladas mensuales a una cadena local de supermercados, la que ahora le pidió 12 toneladas. No sólo se recuperó el mercado interno, sino que vienen paraguayos a comprar acá», destacó. «También -añadió- Brasil empezó a pedir cotizaciones de arroz y consultar a los ganaderos de la zona sobre los cortes de carne sin hueso». Por medio del Frigorífico Alem y la Cooperativa Frigorífica de Alem (COFRA) la provincia había comenzado a trabajar en la venta de carnes y chacinados al Brasil, pero la paridad uno a uno con el dólar congeló la iniciativa. Ahora, el escenario cambió tal punto que la COFRA suspendió las vacaciones de su personal para cubrir la demanda del vecino país. «En el sector maderero, una empresa del Alto Paraná comenzó a trabajar a doble y tomó empleados», refirió. Para el funcionario, el hecho que algunas grandes empresas desatiendan el mercado interno no es negativo, ya que -argumentó- las Pymes que no están en condiciones de exportar y podrán cubrir esa demanda. Las mayores dificultades para generar competitividad se registran en las grandes firmas exportadoras (madera, té, yerba mate; entre otras) que necesitan de insumos y maquinarias para sus productos. En ese sentido, el subsecretario comentó que el jueves se reunió con el director nacional de Promoción a las Exportaciones, Oscar Polverini, quien le prometió gestiones para poner nuevamente en vigencia el Sistema de Importación y Exportación Compensada, que permite ingreso de insumos. Hasta el momento, los exportadores deben ingresar la totalidad de las divisas al país, para luego efectuar la compra de los insumos y maquinarias. «Bajo esta circunstancia el importador de insumos se ve afectado negativamente desde el punto de vista financiero porque para comprar necesita de los recursos que genera con sus ventas al mercado externo. En Misiones se da sobre todo en el sector tealero, que necesita adquirir saquitos y demás insumos para exportar té frío», comentó. VENDER MISIONES Otro de los planteos estuvo relacionado con la necesidad que tiene el Estado misionero de contar con elementos para atraer la erradicación de industrias, tanto nuevas como aquellas que partieron a causa del cambio desfavorable. «Se reclamó que se confeccione un instructivo muy claro para que Misiones pueda salir a vender las bondades para radicación de industria en provincia. Por ejemplo -señaló- para el reingreso de herramientas que se llevó en algún momento, que son capitales argentinos, brasileros, paraguayos o bolivianos. La idea es que entren sin pagar gran carga impositiva, de tal manera que se generen de fuentes de trabajo. La prioridad es para industrias que pueden exportar al mercado extra zona como la yerba mate, el té como infusiones solubles; la fruticultura, jugos concentrados o deshidratados, muebles, terciados, faqueos, casas de madera. También fábricas de tabaco, para mayor darle mayor valor agregado», reseñó. La Zona Franca de Puerto Iguazú jugaría un rol muy importante dentro del esquema de desarrollo que pretende el gobierno para impulsar el crecimiento de la producción local. «También me reuní con Alberto Valle, que es el subsecretario de Industria de Nación y le pedí medidas puntuales para las industrias que se establezcan en la zona franca y transformen la materia prima de Misiones, La meta es que el valor agregado queden en la provincia. Coincido con Valle que las zonas francas deben ser para exportar, pero no puede haber ninguna que lo haga si no tiene una porción del mercado interno. Le hemos pedido que dé la posibilidad de introducir un porcentaje, a cambio excepciones de cargas sociales al personal tomado, en el pago de IVA y a las transacciones comerciales zona franca», refirió. «MISIONES NECESITA ITC DIFERENCIADO» Finalmente, el funcionario apuntó que el tema del Impuesto a la Transferencia de Combustibles (ITC) diferenciado no fue tratado. Este beneficio fue una de las medidas adoptadas para enfrentar las asimetrías con los países vecinos y se teme que sea revisada a raíz del nuevo esquema que propone la devaluación monetaria. «El Ministerio de Economía de la Nación tiene facultades para eliminarlo, pero considero que seria una media no apropiada, porque exportar combustibles con impuestos no es lo mismo que lo hagan las petroleras. Si podemos exportar con algo de ITC y con IVA deberíamos sentirnos satisfechos porque es nafta y no petróleo. La eliminación sería un error muy grande porque Misiones necesita esa herramienta, que regrese lo que se fue, tenemos 10 años de asimetrías muy desfavorables», concluyó.