El sábado a la noche, el 911 recibió un llamado en el que una mujer les dijo que en la calle La Rioja al 2.100 de Tucumán había muerto un hombre de un disparo. Cuando el servicio de emergencia llegó hasta allí, supieron que la víctima se llamaba Cristian Orlando Romano y que tenía 34 años de edad.
Una mujer que estaba allí, familiar del fallecido, les dijo que Romano había estado tomando bebidas alcohólicas con unos amigos y que él mismo se había disparado en la cabeza, mientras jugaba a la “ruleta rusa”. Si bien a los efectivos les pareció extraño que los amigos hubieran desaparecido, la mujer les dijo que lo hicieron por miedo, ante lo que había pasado.
Se espera que en las primeras horas de este lunes estén los resultados de la autopsia del cuerpo y el dermotest en la mano de Romano, para saber si efectivamente él se disparó. Por el momento, el caso no fue girado a la división homicidios, ya que se encuentra enmarcado como “muerte dudosa”.
