Mujeres originarias de Misiones y de Formosa participaron en talleres para conocer sus derechos.
Treinta años atrás no se hablaba de la violencia contra la mujer, era un problema silencioso, no se denunciaba, no había leyes al respecto, no había gente formada en violencia de género, en los medios de comunicación de estos temas no se hablaba, tampoco había ningún tipo de servicio, refugio y ni atención a las mujeres golpeadas. Y en esta época “algo se ha logrado”, destacó Susana Chiarotti, fundadora y directora del instituto de Género, derecho y desarrollo (Insgenar), con sede en Rosario. Afirmó que hay más mujeres concientizadas y se ha empezado a desnaturalizar el tema de la violencia, pero han surgido «nuevas formas de violencia contra la mujer más sutiles y formas de agresión que se naturalizan».
Susana Chiarotti: "Hay violencia mediática, obstétrica, contra la libertad reproductiva, laboral, acoso sexual en el empleo, institucional", entre otras.
No obstante, dijo que la lucha es para combatir las nuevas formas de violencia contra la mujer. En tal sentido se refirió a la “violencia mediática que se ejerce a través de los medios de comunicación, la violencia obstétrica cuando se impone a la mujer una cesárea innecesaria; la violencia contra la libertad reproductiva, que es cuando alguien se opone a que la mujer decida y tome sus metas en salud sexual y reproductiva, luego la violencia laboral, el acoso sexual en el empleo; la violencia institucional que es la que se ejerce en hospitales, geriátricos, en las cárceles”, entre otras.
Los cambios
Chiarotti no obstante rescató algunos logros. “Si antes te decían porque te quiero te aporreo, o se creía que un marido tenía derecho a pegarle a la mujer, ahora se sabe que no, y eso se logró en escasos 30 años, teniendo en cuenta que para un cambio cultural se necesitan como mínimo 100 años y en 30 años, el movimiento de mujeres ha conseguido este cambio brutal en todo el mundo, y es una de las transformaciones culturales más grandes de la historia, falta todavía, porque en 30 años no se cambiará una civilización milenaria que nos inferiorizaba y nos discriminaba», dijo.
Algunas formas de agresión se naturalizan
La titular del Insgenar consideró que los avances realizados «fueron grandísimos y nos alienta a seguir adelante, yo he escuchado en restaurante decirles a la madre “no seas pelotud… y la madre alcanzarle el plato, ese niño que le gritaba a su mamá y esa mama que lo hace ver como natural está naturalizando una forma de agresión y humillación que no puede permitirse, y la gente lo ve como natural, ese tipo de trato degradante se observa en un montón de relaciones humanas, y en la medida que se vea como natural de ahí a un sopapo hay un paso también”.
En el noviazgo
Otra cosa que se ha naturalizado es por ejemplo la violencia en el noviazgo. Según Chiarotti, muchas jovencitas «se engañan creyendo que los celos del novio son una muestra de amor, puede haber un poco de celo natural que es por el temor a perder al ser amado, pero pasado determinado límite los celos son una forma de control de la otra persona, y hay noviazgos donde el noviecito le pide a la chica que no se pinte, no se vista de determinada manera que no salga con amigos varones, después le corta las amistades femeninas y ese muchacho si se casa con esa chica después le corta hasta la relación con la familia, algunos quiere que dejen de trabajar, otros de estudiar, y estas ideas hay que erradicarla, garantizar la plena autonomía de la mujer, mujeres empoderadas, los avances son tan grandes, hay una cosa que es irreversible, las mujeres hemos entrado al mercado del trabajo y no nos vamos a retirar a tejer medias, pasa que eso genera mucha reacción de parte de gente que prefiere tenernos en la casa y mostrarnos que el hogar es nuestro lugar natural y si salimos transgredimos».
Y todavía falta que podamos ejercer los derechos igual que los varones, por ejemplo el derecho a circular por las calles a cualquier hora no es nuestro todavía, no es lo mismo que una chica ande sola por al calle a las 3 de la mañana que ante un varón, y una cosa clave, que no se vea mal, por ejemplo cada vez que hay una mujer violada siempre se busca la culpa en la víctima, cómo iba vestida, tenía experiencia sexual previa, qué tiene que ver, la violación es el único delito donde la investigada es la víctima, y no sólo hay que cambiar la mentalidad de los varones, de las mujeres, sino de los jueces, de todo el sistema de justicia que es muy prejuicioso, agregó la fundadora de Insgenar.
Violencia mediática
Para Susana Chiarotti la violencia mediática es una «forma de violencia que sutil y es la más difícil de combatir, cuando la violencia es grosera por ejemplo cuando un hombre le pega una trompada a una mujer es fácil verlo y rechazarlo, pero esas otras formas de violencia sutiles que nos muestran a nosotras como meros cuerpos, no como cuerpo entero, hay que fijarse qué partes del cuerpo salen enfocados directamente en alguna prensa amarilla o en algunos programas de televisión?, a la cola y el pecho de las mujeres, hasta en eso nos fragmenta, nos muestran como si fuéramos vacas que nos exhiben en el mercado a mejor precio, o como si la mujer fuera un objeto, como algo que vale por su cuerpo y nada más, poco cerebro para analizar, o hay publicidades que también muestran a la mujer como un objeto, o siempre como amas de casa para vender un detergente, de hecho el cuerpo de la mujer sirve para vender desde un auto hasta un champú, y eso es una forma de objetivación y rebaja de dignidad de las mujeres.
Jornada de capacitación en Posadas
Susana Chiarotti estuvo en la jornada que se realizó en Posadas recientemente, en conjunto con el Inadi, en el marco de un proyecto con Católicas por el derecho de decidir (CDD), y donde se trabajó sobre los derechos de las mujeres y especialmente el derecho a vivir una vida libre de violencias. Se reunieron seis provincias, de Santa Fe, Entre Ríos, Chaco, Formosa y Misiones, y en casi todas las provincias, lo poco que se ha organizado para contener y darle ayuda a las mujeres, asesorarla en casos que ha sufrido violencia se encuentra en las capitales.
Profundizaron sobre la nueva ley integral de violencia contra las mujeres que se está implementando en todo el país, Chiarotti explicó que «es una ley de orden público que significa que las provincias sin ningún tipo de excusas la tienen que aplicar inmediatamente sin necesidad que haya una ley provincial, “acá se está empezando a aplicar, lo que necesitamos es que los beneficios de las mujeres que están en capitales de provincia, se extiendan a todos los poblados, ciudades pequeñas y en zonas rurales”, dijo.
Participaron en el taller realizado en el hotel Posads, representantesde la secretaría de la Mujer de Formosa, algunos organismos de Chaco, organizaciones de mujeres de Entre Ríos, estudiantes universitarias de Corrientes, también de la comunidad mbya de 25 de Mayo, y del pueblo Qom de Formosa, que vinieron a exponer su realidad y participar en la capacitación. De Misiones gente del Inadi, Mujeres mercosureñas, del programa de radio «Degeneradas”, investigadoras, trabajadoras sociales y servicio de atención a las mujeres, entre otras.
