Por construcción de casas, aulas y escuelas, el sector recibió unos 220 millones de pesos en los últimos seis años, monto que este año superará los 100 millones. En términos de volumen, se demandaron 14 millones de metros cuadrados. La mayor participación de la industria forestal en la obra pública responde a una estrategia de la provincia y las empresas para aumentar la demanda interna
Aumentar el uso de madera en la obra contratada por el Estado fue una de las principales estrategias impulsadas tanto desde la Provincia como desde el sector privado para incrementar la demanda de ese producto en el mercado interno. Con ese objetivo, las cámaras empresariales de la industria forestal firmaron hace ya siete años los primeros convenios marco, a través de los cuales sus representadas comenzaron a construir viviendas, aulas satélite y luego escuelas.
La idea no era solamente agrandar el campo de negocios de las forestoindustria, sino también reducir la dependencia de este sector a las compras del los mercados externos, decisión que demostró ser más que acertada cuando pocos años después de la firma de los primeros convenios, se desataba en Estados Unidos la crisis de las hipotecas subprime y se desplomaban las ventas de madera a ese país.
Los primeros planes fueron por pocas viviendas, pero los buenos resultados alcanzados por las empresas misioneras, tanto en tiempos de cumplimiento de las obras, cuanto en la calidad de las construcciones, le permitieron a la industria forestal misionera ganar cada vez más espacio en el competitivo segmento de las contratistas de obra pública.
Este año, el sector deberá entregar 850 viviendas por un presupuesto total de 110 millones de pesos (en algunos casos dentro del monto presupuestado se incluye el valor de los terrenos) y escuelas y aulas por un valor de 15 millones. El total del dinero que se destinará en 2011 a la construcción de viviendas de madera, representa alrededor de la mitad del total volcado en los últimos seis años en igual concepto.
Avance sostenido
Según resumió someramente Pedro López Vinader, presidente de la Asociación de Productores, Industriales y Comerciantes Forestales de Misiones (Apicofom), en los últimos seis años ingresaron a las empresas del sector 220 millones de pesos (a valores actualizados) por su participación en planes de vivienda de la Nación y la Provincia. En términos de volumen, la demanda generada por estos planes fue de 14 millones de pies cuadrados de madera, lo suficiente para llenar 100.000 camiones equipo.
Para tener una idea de la incidencia de la construcción de viviendas en la demanda total del sector, vale decir que los 220 millones de pesos que ingresaron en los últimos seis años por ese concepto representan la mitad del total de las exportaciones misioneras de madera y sus manufacturas durante 2010.
Lo que se construirá este año
Este año, las empresas agrupadas en Apicofom y Amayadap, este año están llevando adelante dos convenios de construcción de viviendas. El más importante los compromete a entregar al Instituto Provincial de Desarrollo Habitacional (Iprodha) 568 casas tipo Misionera 1,2 y 3 y su presupuesto es de 68 millones de pesos. El restante corresponde a un plan nacional e incluye 280 viviendas solidarias y tiene un presupuesto de 42 millones de pesos, aunque vale aclarar que en este caso el valor de los terrenos está incluido dentro del presupuesto.
Además las empresas misioneras firmaron convenios por 15 millones de pesos con la Provincia para la construcción de escuelas y aulas satélite.
Respecto a las casas, Vinader explicó que se trata de unidades de entre 28 y 45 metros cuadrados (dependiendo el tipo), de una y dos habitaciones, con baño, cocina y comedor.
Están totalmente impregnadas con productos que garantizan una durabilidad mínima de 30 años, que se puede extender mucho más si se hacen trabajos de mantenimiento y las de mayor categoría cuentan con aislamiento térmico y acústico.
Indicó además que son de diseño modular, es decir que están preparadas para ser ampliadas.
