Los abusos ocurrieron en San Javier, y fueron denunciado en el 2005.
Pablo Nunes Da Silva fue condenado ayer a 12 años de prisión a Pablo Nunes Da Silva por haber abuso sexualmente de una de sus hijastras durante tres años, además por las amenazas y lesiones ocasionadas a las tres hijas de su concubina.
El hombre fue condenado por el Tribunal Penal 1, presidido por el camarista Eduardo DOrsaneo, secundado por Roque González y Martino Errecabolde, que responsabilizó al brasileño a Pablo Nunes Da Silva de violar a su hijastra de 11 años durante tres años, hecho que ocurrió en la zona rural de San Javier, donde estaba radicado el hombre.
El hecho fue denunciado el 14 de enero de 2005 por el cuñado de la menor, quien confesó que el hombre en una oportunidad habría intentado abusar de Noelia, de 14 años, quien opuso resistencia y fue agredida por el hombre.
Al no lograr su pretendido con la adolescente de 14 años, abusó de la hermana de ésta, Paola de 11 años.
Da Silva mantenía a la familia bajo amenazas durante los tres años que duraron los abusos a la menor, y utilizaba un rebenque de cuero crudo para castigar a las mujeres.
La menor fue examinada por el médico policial quien constató la defloración de vieja data y las lesiones.
En la primera declaración indagatoria, el hombre negó todo e intentó desvincularse del hecho, involucrando a un novio de la niña.
Pero en la segunda oportunidad confesó que había pagado 100 pesos a su concubina por las tres niñas. El testimonio asombró a las niñas que no sabían que su madre consintió el abuso de su concubino.
Terminado los testimonios, la fiscalía pidió 15 años de prisión por abuso sexual con acceso carnal, lesiones leves y amenazas. En tanto, la defensa solicitó la pena mínima por la incapacidad cultural del imputado, además solicitó tratamiento psicológico para reinsertarse en la sociedad.
En tanto el Tribunal le condenó a 12 años de prisión.
