Sergio Romero, por ahora arquero suplente del seleccionado argentino, no sólo del disfruta del fútbol, sino que le gustan todos los deportes, por eso está viviendo el sueño de participar de los Juegos Olímpicos de Beijing 2008.
El ex arquero de Racing es un «atleta», como lo llamó el holandés Louis Van Gaal, en referencia a sus aptitudes físicas. Desde chico, viendo a sus hermanos practicar básquetbol en todas las canchas de Comodoro Rivadavia, Romero mamó el deporte como una forma de vida.
«Siempre me gustó el basquetbol y ahora que vamos a ir a la Villa Olímpica estar al lado de Ginóbili, Oberto, va, de todos, porque son unos fenómenos, me pone muy contento. Estoy viviendo un sueño», le dijo Romero a Télam.
El ex arquero de Racing, actualmente en el fútbol holandés, siempre le gustaron todos los deportes, y tuvo chances de ser profesional jugando al básquet.
A comienzos de 2004 de 2004 y luego de que lo viera Enrique Tolcachier (ex entrenador de Gimnasia de Comodoro) en un torneo de jugadores libres, le consultó al padre del aquél entonces recién llegado arquero de Racing, si no quería jugar para Gimnasia que participaba en Liga Nacional, como lo había hecho su hermano, quien estaba en ese momento en Estados Unidos jugando para una escuela secundaria.
La respuesta no fue nada fácil para «Chiquito» Romero, ya que varias cosas referidas al básquet se le cruzaron por su cabeza, pero finalmente desistió de esa propuesta dejando en claro que lo suyo eran los tres palos. Agradeció la propuesta y se dedicó de lleno al futbol.
«Menos mal que tomé esa decisión, porque gracias a eso, entre otras cosas, hoy estoy acá, en algo tan grande como lo son los Juegos Olímpicos», apuntó.
Su hermano Diego jugó en el High School de Lon Morris, en el que salió mejor pívot de la nación, luego pasó a la Universidad de Florida State.
En tanto, en Argentina para 4 equipos: Gimnasia de Comodoro hasta el año 2001, en el 2005-2006 pasó a Gimnasia, donde fue campeón, 2006-2007 emigró hacia Regatas Corrientes y en la 2007-2008 jugó para Quilmes de Mar del Plata. Este año regresó a Gimnasia de Comodoro.
«Mis hermanos son todos deportistas y ellos también están muy felices con que yo esté acá», le dijo Romero a Télam, en una charla distendida.
Pese a que le toca ser suplente de Oscar Ustari al arquero campeón mundial juvenil en Canadá, el año pasado, se lo puede ver en Shanghai muy feliz y disfrutando de estos Juegos Olímpicos.
«Hoy me toca ser suplente y lo tengo que aceptar. Yo duermo con Oscar (Ustari) y me siento muy feliz de poder ayudarlo, de hacerlo sentir bien y apoyarlo en todo. Cuando hicimos el calentamiento antes del partido con Costa de Marfil le preguntaba que necesitaba, si quería que le tire centros para que él estuviera en perfectas condiciones», concluyó.
Una fiesta espectacular abrió los Juegos Olímpicos
