Una variante en ataque introducirá el técnico del Colectivero, Pedro Dechat, para visitar mañana a Guaraní, en su estadio, desde las 15. El resto del equipo será el mismo que igualó el pasado sábado con Central Córdoba de Santiago del Estero. Por todo lo que significan los tres puntos para el resto del cuadrangular, porque un empate podría relegar a los dos representantes misioneros y porque siempre es muy especial el enfrentamiento, se juegue en la cancha que se juegue, Guaraní y Crucero protagonizarán este miércoles, en Villa Sarita, uno de los partidos de la segunda fecha del cuadrangular semifinal, zona A, catalogado como «El partido del año». De acuerdo a lo informado por el club local, el choque se producirá a las 15, en el estadio franjeado, con el arbitraje del marplatense Sergio Gabriel Mella.
Después de los dos puntos perdidos en casa ante Central Córdoba de Santiago del Estero, Crucero está obligado a recuperarlos de visitante y este miércoles tendrá una buena oportunidad ante el clásico rival. Después del descanso del domingo, el lunes el equipo de Pedro Dechat volvió al trabajo y este martes los movimientos con pelota revelaron la formación que utilizará ante los franjeados. Ariel Suligoy, quien suma cuatro goles en el historial de los clásicos, recuperará la titularidad en lugar de Martín Escobar Fretes, verdugo de Guaraní el pasado 16 de marzo. El resto del equipo será el mismo que inició esta fase el pasado sábado con Daniel Doello en el arco; Gabriel Mosevich, Mariano Medrano, Horacio Correa y Dardo Romero en la defensa. En el medio Pedro Brítez, Carlos Marczuk, José Bernal y Franco Cabrera y adelante, Cristian Gutierrez y el mencionado Suligoy.
Entre los relevos estarían Areco, Bruno, Sotelo y los paraguayos Escobar y Bareiro, quienes asoman como las primeras opciones de cambio.
Para Crucero sólo sirve sumar antes de emprender el largo viaje a Salta, donde el domingo enfrentará a Central Norte y un triunfo en el clásico, además de tres puntos vitales para la continuidad del torneo, puede significar un envión anímico muy importante para los cuatro partidos que quedan.
