“Hay que defender a un organismo que cuide a nuestro producto madre y que sea de Misiones”, señaló Julio Petterson sobre la creación del Instituto Misionero de la Yerba Mate

Ante el anuncio de Carlos Rovira para crear el Instituto Misionero de la Yerba Mate, Julio Petterson destacó la necesidad de proteger a los productores y regular los precios. Además, instó a la provincia a defender sus decisiones frente a la intervención nacional en la institución, enfatizando en la necesidad de respetar la autonomía provincial.

Julio Petterson – República

Carlos Rovira, vicepresidente primero de la Legislatura, propuso la creación del Instituto Misionero de la Yerba Mate (IMYM), desde la intervención del Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM), lo cual ha generado controversia y preocupación en la región. Julio Peterson, subsecretario de Yerba Mate del Ministerio del Agro, compartió sus inquietudes sobre este tema.

En este contexto, comentó que “ante las diversidades, nacen las oportunidades, y creo que como misionero y como hijo de esta tierra colorada tenemos que trabajar para que seamos dueños de lo nuestro, dueños de nuestra tierra y de nuestro producto madre, también definir las cuestiones de nuestro producto madre”. 

Haciendo referencia a la reciente intervención en el INYM, Petterson señaló la falta de dirección y liderazgo tras años de trabajo y lucha por la creación de un instituto soñado durante más de dos décadas. “Por muchos años venimos trabajando y luchando en una creación de un instituto soñado a más de 22 años, y de una noche para la otra amanecemos sin el motor y sin una dirección”, dijo.  

En cuanto a las decisiones del gobierno centralista, Petterson destacó la importancia de pensar y actuar desde la perspectiva misionera. “Creo que es momento de que los misioneros pensemos y tomemos las cuestiones nuestras nosotros mismos. Hay que defender un instituto donde cuide a nuestro producto madre, que sea misionero y que sea llevado adelante por un misionero, como Carlos Eduardo Rovira, quien es el impulsor de esto, sin dudas va a funcionar”, agregó. 

El subsecretario también abordó la función del nuevo IMYM en la fijación de precios. Destacó la necesidad de asegurar la seguridad y respaldo a los productores, así como enfocarse en la calidad y proyección futura para las generaciones venideras. “Tiene que ser una herramienta amplia. Primero hay que trabajar en la seguridad, en la contención y certeza de que nuestros productores estén respaldados. Después en la calidad y en la proyección hacia futuro, en lo que vamos a heredar a nuestros jóvenes, a nuestros hijos. El precio hay que trabajarlo, porque realmente es la forma de darle el bienestar a nuestros productores. Hay que regular el mercado con un precio mínimo”, explicó. 

Petterson hizo hincapié en la importancia de regular el mercado con un precio mínimo que garantice el bienestar de los productores. «El INYM no regula un mercado, garantiza un precio mínimo para la producción madre de nuestra tierra. Eso es el INYM que teníamos, y que hoy pretende la nación hacer desaparecer. Prácticamente, si bien no lo hizo, sacó todas las facultades que resguarda justamente a la economía regional”, aclaró. En esta línea, señaló que el nuevo instituto hay  que “mejorarlo y modernizarlo”.

Por otro lado, ante la creación del IMYM, se le consultó a Petterson cómo evitar que las empresas yerbateras vayan a Corrientes. “Nosotros somos productores, producimos el 88%, prácticamente, de la producción adicional de hoja verde. El resto necesita nuestra producción, porque una planta no va a ser llevada de un día para el otro a la provincia vecina. Si lo puede llevar un molino, pero una cooperativa establecida, no. Entonces hay que trabajar en eso”, destacó.  

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Además, planteó la posibilidad de que el IMYM  actúe como comprador y vendedor, formando precios de la yerbatera canchada para respaldar a pequeñas empresas y cooperativas locales. “Con esto garantizamos que se cumpla el precio, el bienestar de los productores y que nuestras pequeñas empresas sigan creciendo. De esa manera, regulamos la oferta y la demanda, con un jugador bien misionero que absorba en gran parte la cantidad de yerba canchada que exista en el mercado misionero, para ponerla a disposición a la venta a las grandes industrias, al precio que nos convenga a nosotros, los misioneros”, comentó Petterson. 

Ante la pregunta sobre la obligatoriedad de vender al IMYM, sugirió que podría ser parcial, enfocándose en mantener un equilibrio de precios que beneficie a los productores. “Hay que ver cómo armar y hay que trabajar. Yo creo que una herramienta tiene que ser similar al mercado consignatario soñado, que ahora justamente lo desregulan. Pero hay que crecer ahí. Tenemos entidades bancarias que pueden trabajar, tenemos una gran herramienta, y si así lo construimos entre todos los misioneros, para el bien de todos”, afirmó. 

En relación a la intervención nacional en la institución, Petterson instó a la provincia a pelear por el respeto a sus decisiones. “Hay que pelear porque es una herramienta creada por los misioneros. Ahora, si la nación y los legisladores nacionales no van a respetar a las provincias, como deben respetar y cuidar, vamos a crear lo nuestro. A nosotros nos van a respetar, lo dijo el propio Gobernador de la provincia”, concluyó. 

“Hay que defender un instituto donde cuide a nuestro producto madre y que sea misionero”, señaló Julio Petterson, sobre la creación del Instituto Misionero de la Yerba Mate

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