Sondeos de opinión a cargo de distintas consultoras privadas recientemente difundidos muestran que la imagen del presidente Mauricio Macri y de su gestión está en su piso histórico. El único consuelo para el Gobierno que se desprende de los números de las encuestadoras tiene que ver con una reducción en la velocidad de la mencionada caída, lo que sugeriría la persistencia de un núcleo duro favorable a Cambiemos que se acercaría a 30 por ciento.
Las encuestadoras de Julio Aresco y Gustavo Córdoba presentaron recientemente sondeos de opinión realizados en septiembre y octubre que coinciden en señalar que tanto la imagen del gobierno nacional, cuanto la intención de voto de sus principales figuras siguen retrocediendo, pero a un ritmo inferior al observado en meses anteriores.
Según el trabajo de Julio Aresco, pese a la crisis económica el Gobierno de Macri mantiene un 36,7 por ciento de evaluación positiva de gestión, frente a un 59,3 por ciento de imagen negativa. Datos similares muestra el sondeo realizado por la consultora Gustavo Córdoba y Asociados que entre otros datos señala que 62 por ciento de los argentinos desaprueba la gestión de Macri y 35 por ciento la aprueba.
En cuanto a la formación de expectativas, tal vez el dato más relevante a la hora de definir el voto, la encuesta de Gustavo Córdoba indica además que 68 por ciento de los consultados estima que el año próximo será peor que el actual y solo 23 por ciento cree lo contrario.
Los números de Aresco son un poco menos pesimistas en ese aspecto: el 37,3 por ciento cree que le irá mejor en 2019, mientras que el 54,7 por ciento cree que la situación empeorará. Según el mismo trabajo 21,1 por ciento de los encuestados evalúa como positiva la situación general del país y un 76,5 por ciento tiene una evaluación negativa.
El trabajo de Aresco deja un dato curioso, parte del electorado de Macri lo volvería a votar a pesar de juzgar de manera negativa el presente económico y no tener expectativas de mejora. Gracias a eso, el presidente conserva una intención de voto de 35,5 por ciento en una primera vuelta; seguido por Cristina, con 32,6 por ciento y Sergio Massa con 11,4 por ciento.
En cuanto a la definición de “núcleos duros”, el trabajo sostiene que 28 por ciento de la población se define como “oficialista” y difícilmente cambie su voto aunque el panorama empeore y 47,3 por ciento se define como opositor y no votaría a Cambiemos aunque si situación personal mejorara.
Desde la consultora de Gustavo Córdoba explicaron que “hemos registrado desde diciembre de 2017 a octubre de 2018 la manera en que los argentinos evaluamos la situación económica del país a un año. A fin del año pasado, daba comienzo el predominio de las expectativas negativas, que llegan hoy a casi un 70%”, cita la encuestadora. Sin embargo, aseguran que hay un pequeño porcentaje que tiene la fe puesta en las políticas económicas del gobierno de Mauricio Macri: “Los que creen que Argentina va a estar mejor dentro de un año representan el 23%”, señalan.
La inflación surge como el principal problema, con 28 por ciento de las menciones, seguido por la corrupción y el nivel de endeudamiento del país, que por primera vez integra el podio de las mayores preocupaciones de los argentinos.
En el trabo de Córdoba, Macri aparece como el dirigente con mayor imagen negativa, con 58,6 por ciento; seguido por Sergio Massa con 53,5 por ciento; Cristina, con 53,4 por ciento y Eugenia Vidal con 49,3 por ciento.
En cuanto a imagen positiva, Vidal y Cristina están muy cerca con 42,4 y 41,6 por ciento respectivamente; en tercer lugar aparece Macri con 33,7 por ciento y finalmente Sergio Massa con 28,5 por ciento.
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