Una madre teme que su hijo nunca volverá a hablar después de que bebiera limpiador de cañerías en un supermercado cuando ella lo descuidó mientras hacía sus compras. Ayman Faisal estaba atado en su cochecito cuando su mamá, Saira, se distrajo. Allí el niño, de sólo 2 años por entonces, extendió la mano, tomó la botella de un estante accesible para un bebé como él, la abrió y la ingirió cambiando su vida para siempre.
El limpiador contenía soda cáustica y esta sustancia le causó graves quemaduras en la boca, las vías respiratorias, el esófago y el estómago. Ayman estuvo luchando por su vida en la sala de cuidados intensivos de un hospital de Manchester.
Ahora, con 6 años de edad, el niño no puede hablar y tiene que ser alimentado a través de un tubo en el estómago. Su familia ha demandado a la tienda, Safa Supertienda en Moss Side, Manchester, y al fabricante del limpiador de cañerías.