El Hospital Escuela de Agudos “Dr. Ramón Madariaga” avanza en la intervención del campo social tanto del paciente como de los familiares. Mejoraron la metodología de trabajo y se duplicó la atención durante el 2015.
El Gerente de Asistencia Social del Hospital Escuela, Alberto Álvarez mencionó que se está registrando en el Nosocomio un crecimiento constante y permanente que va dando una pauta de la labor que se realiza dentro del campo de la intervención social.
En este sentido, el responsable del Departamento de Servicio Social del Hospital Escuela, Lic. Juan Carlos Olivera informó que el balance del año 2015 fue positivo. Desde el abordaje familiar y la intervención se duplicó la atención, se pasó de aproximadamente 1.800 prestaciones a 3.600.
“Muchas veces se desconoce la labor específica del trabajador social en el ámbito hospitalario “se interviene en cuestiones reconocidas como problemas que tienen que ver específicamente con la salud del paciente internado o ambulatorio”, comentó.
Al tiempo que agregó, también se trabaja con la familia, con el contexto familiar y social inmediato abordando principalmente en cuatro dimensiones: situación de salud del paciente, lo socioeconómica, sociocultural y sociofamiliar.
El Lic. Juan Carlos Olivera informó que el Departamento de Servicio Social, dependiente de la Gerencia de Asistencia Social del Hospital Escuela, está conformada por 8 trabajadores sociales, 4 colaboradores administrativos “que trabajan fuertemente en las necesidades de interconsultas de cualquier sector del Nosocomio”.
Además mencionó otro avance que se registró durante el 2015 “se concretaron cambios en la metodología de trabajo, por lo que cada nivel de internación del Hospital Escuela está designada a un trabajador social que hace su pase de sala diariamente”.
El Profesional afirmó que otro logro que se ha logrado fue el trabajo en equipo “siempre decimos que lo más difícil es interactuar con el otro”.
Finalmente comentó, la atención se concreta con la idea de que la única manera posible de entender al paciente es al posicionarse en el otro, para poder comprender la dimensión problema en la cual viene esa persona y su familiar que se encuentran cargados de emociones y vulnerables “hemos logrado la humanización de nuestra intervención”.
