El doctor Guillermo Rolón, Coordinador del programa de Infecciones Respiratorias Agudas Bajas (IRAB) remarcó que es fundamental el diagnóstico y tratamiento a seguir porque puede ocasionar patologías dentro del aparato respiratorio y un desgaste en la parte cardíaca. En ese sentido indicó que hay todo un esfuerzo del paciente para respirar que hace aumentar su metabolismo y su fuerza cardíaca.
Guillermo Rolón. Radio A
El doctor Guillermo Rolón, Coordinador del programa de Infecciones Respiratorias Agudas Bajas (IRAB) habló al respecto de esa enfermedad recordando que la disnea es la dificultad que hay para respirar, para poder incorporar el oxígeno, en tanto la sibilancias son esos ruidos que se producen por la entrada o salida del aire al nivel de los bronquios.
Explicó que “el primer cuadro de la obstrucción respiratoria generalmente es una bronquiolitis, una infección viral que provoca un cuadro similar con moco, catarro y secreción y lo fundamental es que tiene esa sibilancia. Pero si es el primer cuadro, hablamos de una bronquiolitis, ahora, cuando se reitera en el tiempo -un segundo, tercer, cuarto episodio-, ahí podemos hablar que pueda tener un componente tipo alérgico, tipo crónico que puede ocasionar con el tiempo un asma”.
Durante todo el año – indicó el profesional- se producen cuadros de infecciones respiratorias y el asma no es ajena a esa realidad. Indicó que esas situaciones tienen que ver con el clima, el área geográfica donde estamos, el microambiente que son las casas y el macroambiente.
Insistió en la importancia del diagnóstico y tratamiento.
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