El Presidente de la Cámara Regional de Industria Producción y Comercio de Oberá (C.R.I.P.C.O.), Oscar Krieger indicó que por la situación, “lamentablemente se deja afuera del servicio a mucha gente. Hoy el empleador tiene que aportar mucho como carga social, ese es uno de los temas que más preocupados nos tiene y en el que estamos trabajando”.
La Capital del Monte es una ciudad que se destaca fundamentalmente por ofrecer servicios, al no tener industrias muchas industrias grandes, los comercios en su gran mayoría son prestadores de servicios. El titular de la CRIPCO indicó que este año es bastante diferente respecto a la situación económica que atraviesa el país, con una creciente de inflación constante y que no permite realizar grandes inversiones ni compras exageradas, “hasta el año pasado se abrieron muchos comercios y llegaron importantes marcas. Pero a partir de enero y las medidas económicas que se tomaron, sumado a la inflación y retracción económica, se comenzó a resentir el comercio. Hoy vemos la otra cara, donde se cierran locales y hay muchos vacíos o en alquiler, lo peor es que se está dejando a gente sin trabajo”.
Krieger indicó que hoy los bancos dejaron de trabajar con las tarjetas de crédito y largas cuotas, lo que también hace sentir una merma en las compras en los comercios, porque la gente prefiere destinar su dinero en otras aristas y no en compras, “las compras con tarjetas prácticamente desaparecieron, ahora producto del Mundial de fútbol aparecieron facilidades para la compra de televisores, lo que es muy positivo y reactiva el mercado. A nivel país los comerciantes están preocupados, porque el consumidor se llamó al silencio, porque lo que compraba con $100 hace 90 días, hoy ya no lo compra, la inflación le va comiendo el dinero que ingresa a más de 2% por mes. Hoy la situación está difícil y se está volviendo más compleja aun por el clima de incertidumbre que se vive”.
El titular de la CRIPCO señaló que hoy, ante la posibilidad de realizar una compra importante, el consumidor analiza bien cada peso que va a gastar y evita ingresar en deudas, “hoy con tarjeta compran aquellos que saben podrán afrontar las cuotas, el financiamiento está casi en desuso porque es muy caro. Sacar un crédito en la banca, tanto para el comerciante o empresario es muy difícil, todos están esperando saber qué va a pasar después del mundial”.
Para Krieger la “piedra del escándalo” es la carga previsional que implica tener un empleado en regla y esa preocupación es la de todos los comerciantes también, “la cámara está trabajando mucho en esto, el año pasado nos reunimos con el Gobernador Maurice Closs y le planteamos esta dificultad de la carga tributaria, hoy al empresario o comerciante le sale muy caro mantener al personal en blanco. Nosotros estamos de acuerdo en pagar lo que fuere necesario, pero lo que no soportamos más son los diferentes incrementos que se están dando” y agregó, “necesitamos que se trabaje para incorporar más gente que no está aportando y los contribuyentes se pueden ver beneficiados en esta situación. Hoy el comerciante está muy sensible, no quiere despedir pero se ve en la obligación de suspender, reducir las horas extras, lamentablemente ocurre esto”.
No todas son pálidas para el titular de la CRIPCO, quien observa de manera optimista a la segunda parte del año, “de crisis superiores a esta salimos victoriosos, debemos trabajar todos juntos para salir adelante”.
