Los combustibles en Misiones siguen entre los más caros del país

Los hidrocarburos de las mismas petroleras se cobran entre 10 y 25 por ciento más en la provincia que en Capital Federal. En octubre pasado las expendedoras de Posadas cobraron entre 5,30 y 6,50 pesos por litro de nafta súper, mientras que sus pares de ciudad de Buenos Aires vendían el mismo producto a precios que variaron entre 4,83 y 5,60.

Misiones continúa sufriendo pérdidas millonarias a causa de las asimetrías en los precios de los combustibles. Por cada litro de hidrocarburos, en la provincia se paga entre 25 y 60 centavos más que en Capital Federal y las otras grandes ciudades del país, centros que además cuentan con la posibilidad de acceder al gas natural por redes.

 Para cuantificar la magnitud del perjuicio que le provoca a los misioneros esta situación, basta con multiplicar las diferencias que marcan los surtidores por 510 millones, cifra correspondiente a la cantidad de litros de combustible que se consumirá en Misiones este año.

Según datos de la Secretaría de Energía de la Nación correspondientes a octubre del corriente, el litro de gasoil se vendió en Posadas a 4,31 pesos en las estaciones de bandera YPF y a valores que oscilan entre 5,50 y 5,70 pesos en los comercios con los colores de Shell y Esso. En Iguazú el mismo producto se cobró 4,50 en expendedoras YPF y 5,60 en las de bandera de la angloholandesa.

Bastante por debajo se ubicaron los precios en las expendedoras de Ciudad de Buenos Aires: en igual mes los porteños pagaron 4,07 pesos por litro de gasoil YPF, mientras que idéntico producto de las demás petroleras se ubicó entre los 4,60 y 4,80 pesos.

Los habitantes de la capital del país también pagaron más barato por la nafta súper: 4,83 en YPF y entre 5,30 y 5,80 en las demás estaciones, bastante menos que los 5,40 que cobró YPF o los 6,00 de las estaciones Shell en Puerto Iguazú y que los 5,30 que cobró la petrolera hispanoargentina en Posadas y seguramente menos que los 6,60 que cobró Puerta SA por el litro de súper en sus expendedoras de bandera Esso en la capital de la provincia.

Para entender como afecta la situación a nivel microeconómico, basta señalar que un camión que cargue sus tanques en Posadas, deberá pagar 170 pesos más que uno que lo haga en Buenos Aires para hacer un viaje de 1.000 kilómetros.

Otra desventaja para Misiones, aunque más difícil de cuantificar,  tiene que ver con la disponibilidad de los combustibles. Quien recorra estaciones de servicio de la provincia con un vehículo naftero, encontrará muy difícil cargar nafta súper YPF, la más barata en ese segmento, y casi siempre se verá obligado a comprar el producto premium, pagando casi un peso más por litro. Esta situación es bastante menos frecuente en Buenos Aires, donde las expendedoras están bien surtidas.

Otro dato que revela la flagrante inequidad de las políticas de precios de las petroleras, es que la disparidad de precios a favor de Capital Federal y las provincias más ricas, en detrimento de las del Norte, se viene profundizando a pesar de que bastaría un mínimo corrección en las primeras, para compensar financieramente a las compañías por una sustancial reducción de precios en las provincias más chicas.

Por ejemplo: un incremento de solo 1,8 por ciento aplicado en los grandes mercados de ciudad y provincia de Buenos Aires, permitiría a las petroleras reducir un 20 por ciento los precios en Misiones sin perder un centavo en la sumatoria total.

 

LA REGION

NACIONALES

INTERNACIONALES

ULTIMAS NOTICIAS

Newsletter

Columnas