El domingo 6 de abril, a la 21, en el auditórium del Montoya (Ayacucho 1962), se presentará el unipersonal de Linda Peretz. Con siete años de permanencia en cartel, y más de 350 mil espectadores, el espectáculo regresa a la capital provincial. Humor e ironía para hablar de la vida conyugal.
La actriz considera que «con esta obra realizo una labor social, porque la gente lo agradece mucho, se siente identificada y, además, se divierten tanto hombres como mujeres. Ahora estoy estudiando el unipersonal en francés porque tengo proyectado hacerlo en París en 2008».
El guión está basado en el libro de Viviana Gómez Thorpe, que resultó ser también un éxito editorial. Las diferentes conductas femeninas son retratadas en esta pieza que no se priva de la ironía.
Artífice de un éxito
Bajo la dirección de Manuel González Gil, la actriz protagónica fue elegida por su talento y trayectoria para llevar a escena una historia de la que participa de manera activa el público.
Linda Peretz participó en más de cuarenta películas y obras teatrales como «El preceptor», «Los 120 días de Sodoma» y «Popeye y Olivia», entre otras. El éxito la encuentra, desde hace seis años, como la artífice de este particular suceso llamado «No seré feliz…». Además de sus temporadas en Buenos Aires, donde se estrenó en 2001, también ocupó las carteleras de Madrid, Barcelona y en el Distrito Federal de México.
En la puesta en escena lo que ocupa un lugar destacado es la presencia de ese marido que, aunque ausente en lo físico, es el motivo esencial para la catarsis que desata la protagonista frente a los espectadores.
Vida de pareja
De profesión pintora, esta mujer construye un permanente intercambio con sus creaciones artísticas, de lo que deviene un chisporroteo dramático de mucho humor y de gran agilidad escénica.
A partir de ese recurso narrativo, la pintura del marido se convierte en un personaje más que se incorpora a la dramaturgia de la obra y se transforma en un antagonista ideal para el desarrollo de la historia que se cuenta.
