Estiman que la cifra alcanzará los 170 mil kilos en la cuenca de Hipólito Irigoyen contra los 65 mil del año pasado. La actividad genera ingresos a los colonos en momento que no hay zafra yerbatera. Son 27 productores que el año pasado realizaron la primera experiencia.
La cosecha de cebolla de la zona de Jardín América e Hipólito Irigoyen podría alcanzar los 170 mil kilos en esta campaña, una cifra que equivale a casi el triple a lo recolectado el año pasado.
En el 2006 los colonos de esta parte de la provincia realizaron la primera experiencia con este cultivo no tradicional en la región y lograron colocar en el mercado unos 65 mil kilos.
La campaña 2007 comenzó hace unas semanas y de acuerdo a la superficie cultivada tanto los colonos como los técnicos que vienen acompañando el proceso desde que comenzó el proyecto de diversificación calculan que la producción superaría los 170 mil kilos.
«La idea es que los colonos, especialmente quienes se dedican a la yerba mate, cuenten con dinero en la época de la interzafra (yerbatera que se da en octubre y noviembre). Ahora el compromiso de los productores tiene que ser lograr una dependencia para poder autoabastecerse de lo necesario y así desde el Ministerio del Agro poder ayudarlos por ejemplo en la concreción de un packing para seleccionar y vender mejor el producto» dijo Ricardo Maciel, subsecretario de Diversificación y Reconversión Productiva de la provincia, uno de los mentores de este proyecto.
Maciel, quien el martes asumirá como diputado provincial por la Renovación, recordó que este es el segundo año que se cosecha cebolla del «tipo coloradita Inta», en el municipio de Hipólito Irigoyen y que ahora los productores tienen la posibilidad de contar con el producto en un momento del año donde generalmente escasea en el mercado.
La cuenca comprende a 27 colonos que el año pasado se decidieron por cultivar cebolla a partir del fuerte apoyo que recibieron por parte del intendente de Hipólito Irigoyen, Luís Wutzke en conjunto con el técnico de la Casa del Colono, Evaldo Marquart, y de Jardín América Juan Carballo y Luís Bartel, quienes realizan la capacitación y seguimiento en campo.
El área de plantación incluye 17 hectáreas con un rendimiento promedio de 10 mil kilos aproximadamente.
Maciel subrayó que «hace tres años esta era una actividad muy incipiente. Empezamos a trabajar con un grupo reducido en San Vicente. A partir de esta experiencia y una vez que manejaron la técnica de control sanitario y de producción se extendió a otras zonas como Aristóbulo del Valle y Jardín América e Hipólito Irigoyen; incluso, hasta San Ignacio prácticamente».
En ese contexto, indicó que así surgió y se consolidó la producción de cebollas en varios puntos de la provincia y hoy se ha convertido en una actividad rentable para el colono.
En esta campaña año los productores realizaron siembras intercaladas para obtener el producto por etapas y así satisfacer el mercado local durante un tiempo más extenso.
Por su parte, el intendente de Irigoyen, Luís Wutzke, valoró la participación permanente de los productores en los diferentes cursos de capacitación ya que «gracias a ellos se pudo sortear las dificultades» y agregó que otro paso importante fue la calidad del producto, lo que facilitó la rápida colocación del mismo en el mercado de la zona.
