La Justicia se pronunció en favor de los guardaparques, haciendo lugar al amparo solicitado a raíz de las persecuciones que sufrieran por parte de la Administración de Parques Nacionales. El Sindicato de Guardaparques Nacionales de la República Argentina hizo saber que el pasado 13 de mayo se ha hecho lugar en la Justicia Federal, a la acción de amparo sindical conforme al trámite previsto en los artículos 498 y siguientes del CPYC y artículo 43 de la Constitución nacional, contra la Administración de Parques Nacionales y el Poder Ejecutivo Nacional, lo que consta en el Expte. Nº C-53/05, «Sindicato de Guardaparques Nacionales de la República Argentina contra Poder Ejecutivo Nacional y Administración de Parques Nacionales».
Asimismo, en ese mismo acto (Expte. Nº C-53/05) se dejó sin efecto por «vicios insanables» a la resolución 216/05 y 251/05 mediante las cuales se instruían sumarios administrativos a los guardaparques del Parque Nacional Iguazú que procedieran a llevar adelante las medidas de fuerza en la Semana Santa pasada, «en contra de las maniobras que intentan destruir al Cuerpo de Guardaparques Nacionales y su función de protección de la naturaleza; como también la que separara de su cargo al guardaparque jefe Jorge Cieslik».
Se ordena además la medida cautelar de no innovar, a partir de la resolución 190, por lo que las acciones se retrotraen a la situación anterior a cuando fuera notificado el mencionado trabajador, del pedido de un sumario administrativo por parte del directorio de la APN, por defender la situación de los aborígenes Maká en el Área Cataratas los que, mediante resolución 068/04 del directorio del APN fueran desalojados de la misma.
El de hoy es considerado un paso importante hacia la reivindicación laboral de todos los guardaparques del país, quienes a diario, silenciosamente, ofrecen lo mejor de sí en pos de la conservación de los recursos naturales, lejos de mezquinos intereses personales o de un sector en especial.
«La sociedad toda nos ha otorgado la enorme responsabilidad de velar por el patrimonio natural y queremos hacerlo de la mejor manera posible, con pautas claras y el respaldo legal acorde a nuestras funciones y atribuciones. Es necesario que la propia APN asuma con seriedad y respeto la misión que el propio Estado le ha encomendado: Conservar la naturaleza, la vida, en todas sus formas, en su estado más prístino. De nada sirve tomar posesión de grandes extensiones de áreas naturales, y llenarnos la boca de conservación y manejo, si no tenemos quien cuide realmente de esos sitios».
«Esperamos que esta acción, sea el puntapié inicial para lograr los objetivos que nos hemos propuesto, que no son otros que obtener las herramientas legales y concretas que nos permitan trabajar dignamente y con responsabilidad».
