Presentan proyecto para la subdistribución de gas por redes en localidades del interior

La Cooperativa de Cooperativas de Gas Servicios Públicos y Vivienda Misiones presentó un proyecto para calificar y concretar las obras de subdistribución de Gas por Redes en las localidades de Eldorado, Montecarlo, Puerto Rico, Aristóbulo del Valle, Dos de Mayo, Oberá y Leandro N. Alem, iniciativa que además cuenta con la predisposición de autoridades de las cooperativas de Servicios de San Vicente, Apóstoles y Jardín América para sumarse al proyecto que impulsan desde la entidad. El lanzamiento será el lunes 25 de abril las 20:30 en el auditórium de la cooperativa Luz y Fuerza de Libertador General San Martín Ltda., sito en la avenida Carlos Culmey Nº 100 de de Puerto Rico. Se informó que el generar y especializar mano de obra, mejorar la calidad y las condiciones de vida además de optimizar la economía del habitante, desarrollo industrial, como también al crecimiento y desarrollo en su conjunto de los municipios.

Para efectuar la evaluación del impacto y características generales del emprendimiento se adjuntó en el anexo I el informe correspondiente, y en el anexo II detalles de tareas a efectuar en la etapa de calificación como subdistribuidores de Gas por Redes.

Asimismo se invitó a participar de nuestro acto de lanzamiento, durante el cual se efectuará la firma de un Acta de Colaboración entre distintas entidades tendientes a propiciar el desarrollo de este tipo de iniciativas, además de firmar el contrato tendiente a concretar la etapa de calificación como subdistribuidores de Gas por Redes, para lo cual estarán presentes autoridades provinciales y municipales además del movimiento cooperativo solidario nacional, provincial y local.

Con este tipo de emprendimientos reafirman el compromiso de promover el desarrollo de esas localidades tratando de estar a la altura que las circunstancias ameritan. El lanzamiento será el lunes 25 de abril las 20:30 en el auditórium de la cooperativa Luz y Fuerza de Libertador General San Martín Ltda., sito en la avenida Carlos Culmey Nº 100 de de Puerto Rico.

ANEXO I: OBJETIVOS EN EL SISTEMA DE DISTRIBUCION DE GAS LICUADO POR REDES
Introducción
El presente trabajo está orientado a la determinación de los aspectos más relevantes que involucran a los sistemas de distribución de gas por redes para usos urbanos.

Objetivo general
El objetivo general del proyecto es el de promover y/o instrumentar acciones concretas destinadas a mejorar la calidad y condiciones de vida de la comunidad en su conjunto, incorporando además nuevas técnicas en determinados procesos productivos / industriales con las consiguientes ventajas por reducción de costos de producción, mayor seguridad y menor impacto ambiental; sustituyendo la utilización de Gas Licuado envasado en cilindros, garrafas y garrafones, así como también otros combustibles, como el kerosene, gasoil, leña, etc., por el sistema de provisión de Gas Licuado mediante redes de distribución domiciliaria.

Objetivo inmediato
Evaluar desde las potencialidades de autogestión de la comunidad de la jurisdicción, la constitución de un sistema de subdistribución, conforme los términos de la Ley Nacional N° 24.076 y demás reglamentaciones vigentes que rigen en la materia, para proveer a las localidades de una red de distribución de gas licuado susceptibles de convertirlas en el futuro a gas natural, permitiendo continuar con el abastecimiento a todos los usos urbanos ( residencial, comercial, industrial, etc.).

Oportunidad
La eventual posibilidad de que la región acceda a un sistema de gasoductos constituye un factor determinante para anticiparse prudentemente a los acontecimientos y establecer las estrategias apropiadas para asegurarse un proceso participativo en el sistema de distribución domiciliaria que devendrá al concretarse la obra.

Dicha circunstancia merita la evaluación de los sistemas que en la transición, es decir desde el momento actual hasta que se concrete y ponga en funcionamiento el gasoducto, permitan el fortalecimiento de los factores locales para la prestación del servicio, hecho este que generará beneficios sobre el conjunto de la comunidad, con la consiguiente mejora en la calidad de vida de sus integrantes tanto individualmente como por sectores.

Conveniencia
La instrumentación de una estructura de carácter local para la prestación del servicio de distribución de gas por redes, es el medio más idóneo para fortalecer el concepto de «servicio público» que reviste el mismo, por encima de cualquier otro interés puramente comercial. Hecho éste que a juzgar por la experiencia de más de diez años de sistemas privatizados, se ve claramente al evaluar tanto la calidad de la prestación como la estructura tarifaria y valores que abonan los usuarios del sistema.

Esta línea de pensamiento se comprueba en aquellas localidades o regiones donde se han consolidado localmente los organismos prestadores mediante cooperativas de servicio u otros entes de autogestión participativa, que para el caso particular del gas, la propia Ley prevé, con carácter de subdistribuidores.

Es de destacar también que estos aspectos se potencian sustancialmente cuando se complementan servicios, dado el mejor aprovechamiento que se produce de los recursos humanos, equipamiento, infraestructura, etc.

Además de lo expuesto, cabe mencionar otros aspectos que tienen una relación directa con la modalidad propuesta, acentuando su conveniencia; los más destacables son:

-Creación de nuevas fuentes de trabajo genuinas: este factor se ve reflejado en las distintas etapas del proceso, es decir tanto desde la ejecución de las obras (planta, redes, extensiones) como en la prestación del servicio a través de las tareas específicas administrativas y operativas como en el mantenimiento, además de la reconversión, readecuación e incorporación de las instalaciones domiciliarias.

-Mayor calificación en los recursos laborales: la incorporación del servicio trae naturalmente aparejada la necesidad de especialización y/o capacitación para obtener la correspondiente matriculación como instalador autorizado.

-Movilización de la economía local generada por la provisión de materiales e insumos en general, principalmente durante el período de ejecución de las obras y en menor medida en el período de prestación del servicio.

-Mayor competitividad de la producción local y/o regional por economías en los costos de producción, particularmente en aquellas industrias en que cobra relevancia la incidencia de los combustibles como insumos.

Distribución por redes
Este sistema constituye el medio más moderno, seguro y económico para la provisión de combustible apto para diversos usos, en cualquiera de las modalidades más comunes y desarrolladas mundialmente, es decir Gas Natural (GN) o Gas Licuado de Petróleo (GLP), a lo que debe agregarse la versatilidad de las mismas, puesto que en su diseño, se prevé la utilización tanto de uno como del otro. Debe destacarse en tal sentido que la distribución propiamente dicha del GLP, es decir desde la salida de la planta hasta el punto de consumo domiciliario, se efectúa en estado gaseoso.

Es frecuente, en las regiones y países de mayor desarrollo, el tendido de redes para la distribución de GLP, como etapa previa a la construcción de gasoductos troncales o ramales de alimentación para el transporte de GN, con lo que se optimiza la inversión al disminuir los períodos de espera para su plena utilización, haciendo más rápido el proceso de recuperación del capital. Esta ecuación se potencia favorablemente cuando se registran grandes consumos en el área de distribución (industrias, generación de energía eléctrica, etc.).

En el caso particular de nuestro país, es importante la experiencia realizada por la ex empresa estatal Gas del Estado, en ciudades como Mar del Plata, Tandil, Tres Arroyos en la Provincia de Buenos Aires, Viedma, Bariloche en Río Negro, Esquel en Chubut, Ushuaia en Tierra del Fuego, donde se inició la distribución con gas propano, y luego, en la medida que se fue incrementando el caudal de usuarios y produciéndose el acostumbramiento a la centralización en un solo servicio para la cocción de alimentos, calentamiento de agua y climatización de ambientes, tanto desde el punto de vista doméstico como comercial y/o industrial, y también la adecuación de las instalaciones internas al concepto de máxima seguridad, se fueron buscando las soluciones económico-financieras para ejecutar los gasoductos de acceso y convertir a gas natural.

Ventajas comparativas
Mejor ecuación económica:

El ahorro económico directo que implica la utilización del gas licuado por redes es de aproximadamente el 70%, tomando un caso tipo de usuario residencial, con el consiguiente beneficio en la economía hogareña. Más destacable es la ventaja cuando su uso está orientado a los grandes consumos industriales al disminuir en forma directa los costos de producción lo cual trae aparejado mayor competitividad del producto en el mercado, e indirectamente repercute favorablemente al posibilitar una más rápida recuperación de la inversión inicial (por el tendido de las redes de distribución), beneficio éste que se derrama sobre el conjunto de la comunidad.

Mayor rendimiento:
Como ventaja adicional, el usuario solamente paga el gas efectivamente consumido con posterioridad a su uso, en tanto que con el gas envasado queda en el interior del recipiente una proporción residual que sin ser utilizada la abona al adquirir la garrafa o cilindro y que significa entre un 5% y 10% del contenido según sean cilindros o garrafas.

Precios regulados:
La distribución de gas por redes es considerada por las disposiciones vigentes como un servicio público, por lo que las tarifas están reguladas y controladas por el ENARGAS, ello fortalece el criterio de previsibilidad de costos de los procesos productivos.

La modificación de las tarifas no solo debe estar debidamente justificada, sino que además debe ser autorizada previamente a su aplicación por la autoridad respectiva. En contraposición a ello, tanto el gas envasado como el resto de los combustibles líquidos de uso corriente quedan «librados al arbitrio del mercado».

Calidad del producto:
La centralización del almacenaje o alimentación del sistema posibilita un control permanente de la calidad del producto entregado a los usuarios, lo cual permite asegurar un estándar en el poder calorífico del gas en el punto de consumo, así como el ajuste de la tarifa a dicho patrón.

Mayor seguridad:
Al centralizarse el almacenaje del gas licuado en una planta adecuadamente ubicada, se optimizan los controles de los puntos de mayor riesgo quedando éstos restringidos a ese único ámbito; en tanto para el caso de gas envasado en garrafas o cilindros el abanico de riesgos se amplía al traslado de estos recipientes, con la posibilidad de accidentes de tránsito, manipulación de carga y descarga al vehículo de transporte, instalación y estadía en el domicilio de consumo; aspectos estos que son trasladables a los demás combustibles líquidos de uso frecuente (kerosén, fuel-oil, gas-oil) con el agravante que en estos últimos los controles y exigencias son menos estrictos y frecuentemente transgredidas.

Además, la presión a que es suministrado el gas por red es sustancialmente menor a la presión de trabajo de los recipientes de gas envasado.

Incidencia ambiental:
Si bien este no es un factor debidamente ponderado al momento de las decisiones, resulta destacable la ventaja del gas en general sobre los restantes combustibles derivados de petróleo para la generación de calor por tratarse de un combustible «limpio», no produce humo (material particulado), menor cantidad de monóxido de carbono, anhídrido carbónico y su combustión es completa con una sencilla regulación.

ANEXO II: DETALLE DE TAREAS A EFECTUAR en la etapa de calificación como Subdistribuidores de Gas por Redes.
1. Relevamiento físico-urbanístico de las localidades involucradas.

2. Recopilación y análisis de las disposiciones municipales relativas a la cuestión.

3. Anteproyecto de Red de Distribución de Gas (Primera Etapa) de las localidades afectadas.

4. Anteproyecto de Planta de Almacenamiento e instalaciones conexas (Primera Etapa), en aquellas localidades que resulte necesario para el funcionamiento del sistema.

5. Memoria Técnica y Cómputo de Materiales de las Plantas de Almacenamiento.

6. Evaluación Técnica, Legal / Estatutaria y Económica de Miscoopgas y Cooperativas involucradas en la propuesta de Subdistribución.

7. Tramitación de la Factibilidad Municipal.

8. Tramitación de las autorizaciones para la ejecución de la Red de Distribución, ante las reparticiones municipales.

9. Tramitaciones ante la Distribuidora local conforme las disposiciones.

10. Información básica a suministrar al ENARGAS, según Resolución N° 10/93.


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