Es un testigo clave en la causa por el asesinato del cineasta. Según uno de los abogados de Luis Raúl Menocchio -el principal sospechoso del crimen- el testigo favoreció a su defendido.
El capitán del barco donde habría sido asesinado el empresario televisivo Claudio Nozzi relató hoy ante la Justicia su versión de los hechos que precedieron al crimen.
Según los defensores de uno de los imputados, Luis Raúl Menocchio, el testimonio del marino «demuestran la inocencia» de su cliente.
El navegante civil Vicente Astorga, de 34 años, compareció a las nueve ante la jueza Laura Varela, el fiscal Raúl Pasetto y los cuatro defensores de Menocchio, quienes calificaron la testimonial como «muy positiva para nuestro cliente».
Después de tres horas y media de interrogatorio, Astorga salió con sus anteojos de sol puestos y con intenciones de no hacer declaraciones, pero finalmente concedió una miniconferencia de prensa en la que admitió haber tenido contacto personal con Nozzi en Corrientes.
«Yo ví a Nozzi acá después de que llegamos con el yate, pero no puedo dar más detalles por recomendación de la Prefectura», dijo a DyN el capitán de la embarcación, quien seguirá en esta Capital por unas horas más hasta que «fije domicilio en Buenos Aires».
El navegante, que en rigor tiene el rango de patrón de a bordo, aseguró que volverá al puerto de San Isidro a ejercer su actividad después de fijar un domicilio legal, dado que «seguiré vinculado a la investigación como testigo».
También admitió que fue contratado por Nozzi para «traer el yate desde San Isidro hasta Corrientes, pero no sé cuál era el destino final», a la vez que reconoció haber seleccionado a los tripulantes que lo acompañaron.
Además del cocinero, que está detenido por el homicidio, viajaron con Astorga desde Buenos Aires su hermano como timonel de relevo y un segundo de abordo denominado práctico, quienes por el momento no están vinculados a la causa.
«Además del práctico traje a mi hermano porque necesitábamos reemplazarnos para navegar de noche», explicó el testigo a la salida del Juzgado de Instrucción Nº 5, sito en el denominado Edificio Patono de esta capital.
Después de Astorga salieron los defensores de Menocchio, quienes consideraron «muy positivas las respuestas que dio el capitán del barco a la jueza, dado que no se desprende de sus manifestaciones ningún indicio de que nuestro cliente sea el asesino».
El abogado Ernesto González, escoltado por sus pares Juan Ferragud, Miriam Irazusta y Gustavo Briend, aseguró que a partir de la testimonial de Astorga «empieza a abrirse la puerta para demostrar que Menocchio no mató a Nozzi».
El letrado ratificó que Menocchio y Nozzi eran amigos y que estaban en Corrientes para cerrar una «operación de lavado de dinero muy importante», a la vez que resaltó la presencia de un sistema de bengalas en el crucero Trasulag II, del empresario muerto.
«Presten atención a la declaración de Astorga sobre las bengalas que había en el barco para demarcar una pista de acuatizaje nocturno en el río Paraná y verán cuál era la finalidad del viaje», reveló González.
Luego de la declaración de Astorga comenzó una segunda audiencia para interrogar a un menor de 13 años, hijo de un conocedor del paraje donde apareció muerto Nozzi, citado por haber transportado desde el yate a la osta a sus ocupantes.
Los abogados de Menocchio, acusado además de un doble crimen en Paraguay, aseguraron que el testimonio del adolescente contribuirá a demostrar la inocencia del principal sospechoso. (INFOBAE)
