El fiscal había solicitado una pena de seis años y el abogado defensor intentó colocar a su cliente como la víctima de la agresión. El hecho fue presenciado por dos mujeres, que ayer volvieron a declarar.
n hombre que intentó matar de un balazo en la cabeza a su esposa, fue condenado ayer a diez años de prisión por el Tribunal Penal 1 de Posadas.
La sentencia recayó sobre Juan Domingo Avalos, de 37 años, quien se encuentra detenido desde el 22 de agosto de 2003. El imputado fue condenado por los delitos de «homicidio calificado en grado de tentativa y tenencia ilegal de arma de guerra.
De acuerdo con la investigación realizada por la Justicia, Avalos regresó al atardecer a su casa del barrio Motem, donde mantuvo una discusión con su esposa, Norma Peña, quien no había terminado de cargar el bolso que debía llevar a Oberá, ciudad adonde iba a trabajar.
Otras dos mujeres que estaban en la casa de Avalos vieron cuando el hombre tomó un revólver calibre 38 y apuntó a la cabeza de Peña, a quien comenzó a insultar.
En esas circunstancias ingresó en el dormitorio la hija de la pareja, que le dijo a su padre que la matara a ella. El hombre la apartó con su brazo derecho mientras con la izquierda sostenía el revólver.
Norma Peña alcanzó a ver cuando el tambor del arma comenzó a girar y supo que era su última oportunidad: se arrojó sobre el revólver y con ambas manos empujó el cañón hacia el piso, donde impactó el proyectil.
El forcejeo entre ambos siguió algunos segundos, hasta que Avalos escuchó el sonido de una sirena y escapó con el arma.
Un poco más tarde la Policía lo detuvo en la Terminal de Omnibus.
Peña contó ayer que su marido siempre fue violento: la castigaba a ella y a su hija en forma frecuente, motivo por el cual radicó varias denuncias.
Los peritos establecieron que al momento de la agresión, Avalos se hallaba en estado de ebriedad, lo cual hacía que resolviera algunas situaciones de manera compulsiva, sostuvo el psiquiatra Jorge Laspada.
El fiscal Rolando Oliva pidió que Avalos fuera condenado a seis años de prisión, mientras que el abogado Roberto Bondar pidió la absolución.
El defensor se basó en el relato que hizo su cliente. Es que el imputado le dijo a los camaristas que en realidad fue Peña quien lo apuntó con el revólver para evitar que la abandonara. Y que él alcanzó a arrebatárselo, produciéndose accidentalmente el disparo.
Tras deliberar media hora, los camaristas Martín Errecaborde, Angel Dejesús Cardozo y Demetria González de Canteros condenaron a Avalos a diez años de prisión.
Subtitulo/Declaración con anécdota
Norma Paredes fue una de las testigos presenciales del hecho. Ayer fue la última en prestar declaración testimonial ante el Tribunal. Sostuvo que el día en que se produjo la agresión había llegado a la casa de la víctima en compañía de Sandra Maidana, ya que las tres militaban en la misma línea interna.
Cuando se produjo la pelea entre Juan Domingo Avalos y su esposa, Norma Beatriz Peña; Paredes fue la primera que decidió abandonar la casa.
Ayer recordó que luego de escuchar el disparo, atinó a salir corriendo y en el apuro agarró el termo y el mate de la Peña y olvidó en la vivienda su teléfono celular.
La mujer fue quien llamó a la Policía tras pedirle prestado el teléfono a un vecino, al que también le dejó el equipo de mate.
Las dos testigos coincidieron en que fue Avalos quien agredió a su esposa y luego tomó el revólver con el que intentó dispararle delante de su propia hija.
Las dos mujeres le pidieron al Tribunal que se les leyera la declaración que realizaron ante el juez de Instrucción ya que no recordaban muy bien el hecho. Sin embargo, fueron valiosos los datos que aportaron a la Justicia, que finalmente condenó al imputado.
