El obispo Martínez dijo que el conflicto de poderes daña la democracia y a la gente

El obispo de la Diócesis de Posadas, Juan Rubén Martínez reflexionó con motivo de las fiestas de fin de año y consideró que fue un año trajinado y conflictivo, pero en medio de todo ve esperanza para el año próximo, y que «en gran parte depende de nuestras actitudes y compromiso». Dijo que el conflicto entre el Ejecutivo y el Legislativo «daña la democraciay por lo tanto daña la calidad de vida en la provincia, y creo que daña a la gente». Cree que se deben tener «actitudes ciudadanas que prioricen el bien común sobre las estrategias del poder», señaló el obispo Martínez.
El titular de la Diócesis de Posadas, antes de viajar a Buenos Aires esta mañana también habló de crisis moral y de corrupción. Declaró que la crisis moral existe y se da en muchas áreas. Sostuvo que «en Misiones es evidente que hay muchas manifestaciones de falta de crítica social y de corrupción». Amplió que esto se da en muchas áreas, y puso como ejemplo «cuando los chicos consumen droga hay gente que hace la vista gorda o no se expresa por el tema, también hay otras formas de corrupción que son más pequeñas y no dejan de ser importantes, como falta de transparencia, malversaciones y tantas cosas que exigen que revisemos y llegar a fin de año es una buena oportunidad», agregó el prelado. En cuanto a las elecciones dijo que hay que votar con la cabeza, porque «somos una cultura muy afectiva y sentimental, pero tenemos que usar la lucidez para ver las consecuencias que tienen después que pasen las instancias del voto». (Radio A).

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