Restauración, según una perspectiva del Reino de los cielos, es devolver lo creado a su estado original. Las personas tienen que volver a ser lo que fueron creadas para ser, y los ámbitos de la sociedad tienen que volver a ser lo que están llamados a ser. Y como hijos de Dios somos llamados a ser instrumentos de restauración de todas las cosas. Veamos lo que nos dice la Biblia.
LA DIMENSIÓN DE LA RESTAURACIÓN: INSTRUMENTOS DE RESTAURACIÓN
(Ver Romanos 8:20-21) Restauración, según una perspectiva del Reino de los cielos, es devolver lo creado a su estado original. Las personas tienen que volver a ser lo que fueron creadas para ser, los ámbitos de la sociedad tienen que volver a ser lo que están llamados a ser.
Es un problema cuando secularizamos todas las profesiones y ámbitos de nuestra sociedad. Sentir un llamado de Dios no necesariamente significa ser pastor, evangelista o profeta dentro de las cuatro paredes de una iglesia. Por lo general cuando hacemos todo secular, creamos una barrera que impide que el Reino, con su diseño original, se establezca allí.
Cuando la religiosidad se apodera de un hijo de Dios nos vemos inhabilitados para restaurar a la creación. Esto no es negar lo que está fuera de Dios, pero sí entender que mucho de lo existe en el mundo es fruto de parte de esa imagen original que supervive en la creación, que fue desarrollando lo que sabe desarrollar.
Por eso hay algo profundo y espiritual en todos los seres humanos que se despierta cada vez que reconoce en el mundo material un valor que refleja el Reino de Dios. En otras palabras, nuestra esencia reconoce su origen. Esto es aplicable a la excelencia, a la honra a la creatividad, etc.
Somos llamados a ser instrumentos de restauración de todas las cosas, no sólo de la gente. Estamos llamados a redimir la mismísima creación. Nuestro desafío es muchos superior al de salvar a personas de ir al infierno. El mundo entero necesita ser redimido por el sacrificio de Cristo. Por eso, dice la Biblia que fue sometido a frustración, y de ese estado hay que sacarlo.
A-¿Cómo sacamos de la frustración un objeto o actividad tomada por la corrupción de este mundo?
1.Tenemos que ver para qué sirven en la extensión del Reino de los cielos en la Tierra. Por no comprender esto antes, la religiosidad hizo que la iglesia no esté metida en un montón de ámbitos. Pero tenemos que estar en los negocios, en la política, en las artes, en las profesiones, si sabemos que estamos llamados a eso, y revelar a Jesús en el lugar que nos toque. Muchos objetos antes no eran usados porque su origen había quedado ligado a algo profano. Lo que no entendíamos es que su existencia refleja la gloria de Dios que habita en nosotros.
2.Tenemos que estar a la vanguardia de la utilización de un objeto, actividad o profesión. Demostrar que en el Reino las cosas se hacen de otro modo, así podremos revelar la excelencia, creatividad y honor en plenitud, restaurar el ámbito implicado. Que el Reino de Dios quede en evidencia a través de los frutos de nuestras vidas.
B-Pero, ¿cómo sacamos de la frustración a la gente?
Veamos cómo a través de la unción restauradora de David // (Ver 1Samuel 22:1 al 3)
Dios usó a David para cambiar la vida de 400 hombres que eran lo peor de lo peor de la sociedad. Estaban amargados y desesperanzados, pero terminaron siendo grandes guerreros de renombre. ¿Cómo hizo para restaurar la imagen de Dios en ellos? ¿Cómo hizo David para formar en ellos personas acordes a su propósito divino?
Los valientes: 2 Samuel 23:8 // 1 Crónicas 11:10
- Les dio el ejemplo // 1 Samuel 26:23
Solo quienes se esfuerzan por ser un ejemplo pueden infundir confianza y seguridad en la gente que necesita ser cambiada. Si no podemos ser responsables, leales, íntegros, constantes, determinados, disciplinados, aún debemos crecer en el ejemplo. Somos de ejemplo cuando nos volvemos un modelo posible de ser imitado. No significa ser perfectos, sino mostrar que a pesar de nuestra vulnerabilidad hemos logrado vivir como Jesús nos mandó a vivir.
Este pasaje muestra a un David que se comprometió a ser leal a su rey, que lo quería matar, y respetó su palabra hasta el final. Cuando hay algo de falta de integridad, la hipocresía nos pone en evidencia. Si queremos ser un ejemplo empecemos por volvernos humildes para cambiar lo que nos impide brillar.
- Les infundió esperanza // 1 Samuel 30:6 y 7
Desde que llegaron a la cueva de Adulán estaban sin esperanza, pero David les dio una esperanza y un motivo por el cual vivir. Cuando los hombres de David estuvieron tan mal, luego del ataque amalecita, él acudió a buscar a Dios y tomó ánimo. Supo hacer lo correcto, en las peores situaciones, y eso esperanzó a sus hombres. Si nos quejamos, criticamos, o actuamos impulsivamente, no esperemos que la gente que nos rodea sienta algo de esperanza. No podemos tener palabras que generen un ambiente negativo en nuestra boca. Por algo Josué terminó reemplazando a Moisés, fue uno de los dos, entre doce, que infundieron esperanza.
- Les infundió valentía y enseñó a tomar riesgos // 2 Samuel 23:8 al 23
Este pasaje evidencia que los hombres de David absorbieron de él una gran pasión por hacer lo que hacían. Adquirieron tanta esperanza, que se atrevieron a hacer cosas que otros antes no habían concretado. Un buen líder empuja a sus discípulos a tomar riesgos, e infunde valentía para vencer todo tipo de temor que quiera paralizar el avance de su vida y propósito. Necesitamos infundir lo mismo. Un liderazgo que infunde temor no forma valientes, sino cobardes, y los cobardes jamás fueron un ejemplo de hombre restaurado a la imagen de Dios. Jesús es el máximo ejemplo de valentía, porque enfrentó el rechazo y la muerte sabiendo que quien lo llamó lo estaba sustentando.
- Les enseñó a depender de Dios // 1 Samuel 22:5, 23:2 al 4
En todo tiempo David les mostró dependencia a Dios, y mientras estuvieron bajo su mando demostró que decidía lo que decidía por su dependencia a Dios. Si primero nosotros no dependemos de Dios es difícil que enseñemos a otros a hacerlo. Seamos de quienes van a consultar a los profetas de Dios y que claman a Dios buscando dirección para cada decisión que debamos tomar. Enseñar a otros a ser dependientes de Dios les permitirá volver a su estado original, porque así fuimos creados por Él.
Que Dios te bendiga y tengas una semana de victoria!
Pastor David Decena Centro Familiar Cristiano Eldorado.
Prédicas en vivo los miércoles y domingos 20 horas, a través de http://cfceldorado.org/
Reflexión del Pastor Guillermo Decena: «Hay vida en la fe”
