No solamente retiran al Estado sino que lo endeudan, hipotecando abiertamente el presente y las generaciones venideras, que tendrán que pagar o entraran en default, y con un Estado flaco y pobre tendremos menos educación y salud pública.
Los anuncios, por ahora, son marquetineros, pretenden ser efectistas, distracción publicitaria, y saturan convulsivamente los canales televisivos y medios adictos con escándalos de corrupción que debe resolver la justicia. Se quiere compensar con circos televisivos las medidas más antipopulares y oligárquicas de las últimas décadas.-
La nueva zanahoria es que pronto tendremos inflación de 1 dígito y las empresas pelearan para tomar personal, fortalecidas por el aluvión de créditos, apoyo del Estado y lluvia de dólares, solo me trae a la memoria cuando en los 90 nos decían que estábamos mal pero vamos bien, y así nos fue.-
A medida que transcurre la Historia podemos afirmar que la Economía es una ciencia social y política, nunca es neutra. No debe haber ninguna medida económica que carezca de un interés político. Por algún motivo el economista Thomas Piketty cree que la mala distribución del ingreso entorpece el crecimiento, y dijo “la desigualdad no es algo para dejar en mano de los economistas”
La provincia con gran esfuerzo y librando una lucha cultural en Derechos Humanos creó un ámbito para debatir y proteger garantizando los Derechos económicos, sociales y culturales (DESC) consagrados en Pactos Internacionales, reconocidos por nuestra Constitución Nacional y que se cumplen en la práctica y en plenitud en el Programa Provincial de Recuperación Nutricional llamado Hambre Cero en los 75 municipios de la provincia. No solamente se decidió combatir el emergente más doloroso de la pobreza, como deuda biológica, cual es la desnutrición, sino que la prevención permitió junto a otras medidas disminuir la mortalidad infantil, e imponer una mirada y abordaje integral de la familia como lo establece lo más avanzado de la academia social.
La Justicia Social no se recita, se ejecuta con y para la gente a partir de un Estado que exprese una fuerte convicción y priorice el concepto de calidad en el gasto social.-
Los países de la región-Mercosur y vecinos- padecen una debilidad crónica a causa de la tremenda desigualdad económica y social produciendo una inflexible brecha entre los poco ricos y los muchos pobres.-
Pero los pobres sin un Estado que practique humanitarias políticas públicas de inclusión social tendientes a igualar la sociedad están muertos en vida por achicamiento de su ciudadanía como concepto de sujetos de derecho, que los llevará a dudar si vale la pena la libertad y hasta la democracia en un sistema que los banaliza y solo da oportunidades a los que más tienen, ejercitando el paradigma del individualismo neoliberal.-
Si el Estado no invierte para el pueblo el Mercado no lo hará, hasta la infraestructura educativa, sanitaria, de bienes y servicios no está en los cálculos del mercado, hasta el salario es interpretado como un apaciguador social como un gasto en la estructura de costos y no como un derecho del trabajador, al neoliberal le preocupa el salario como eje del estatus de consumidor del pueblo.
Nos debemos preguntar con preocupación creciente quien construirá un CAPS o una comisaría o una escuela secundaria en cada pueblo?
Debemos ser conscientes que sin Estado con capacidad de respuesta se acrecentará la pobreza sociológica y estructural, no la estadística en la cual una medida circunstancial hace que una familia está por arriba de la línea de pobreza, pero en pocos días puede volver a caer en la misma, pero su estado social no varió de la primera situación.-
¿Que tiene que ver la pobreza y el Estado con la desigualdad?
Un ejemplo para entender: leo un artículo en diario nacional que titulan con una pregunta: Hay crisis? Y hace referencia a la camioneta más vendida en abril cuyo valor es $800.000.- de una marca muy conocida, era una cifra superior a 3.000 unidades. Quien las compró? Pensé no pueden ser los tareferos, los empleados públicos, los pequeños productores agrarios, lógicamente no era así, por los patentamientos se deducía que fueron a zona sojeras y agrícolas de la pampa húmeda. Mi primera deducción fue que estábamos viendo el resultado de la fenomenal transferencia a sectores de acumulación capitalista, y sin duda un impulso más a la brecha de desigualdad.
Qué paradoja mientras para disminuir el déficit fiscal se expulsa personas a la desocupación se transfiere inmensos beneficios a las grandes empresas, sacando subsidios a las provincias más pobres y desprotegidas, o disminuyendo la inversión social.
Evidentemente el gobierno no es neutro y por ende las medidas económicas desprotegen a muchos y favorece a unos pocos, tienen un fuerte sesgo político ideológico, y por más que reconozcamos en democracia la legitimidad de un gobierno no impide resaltar como retiran al Estado como regulador de la economía para que esta sirva al pueblo y no a intereses sectoriales, y además nos quieren hacer creer que ya llegará el derrame distributivo de la mano del Mercado.
Quizás por defender un Estado que participe en la economía promoviendo medidas que favorezcan el crecimiento pero a la vez defienda a los trabajadores, a los más débiles, a los que menos tienen y practique un progresismo en busca de mayor igualdad, lo tildarán de populista.
Yo diría, a esta altura, el calificativo es lo de menos.-
