El instructor le salvó la vida abriendo el paracaídas a 1200 metros del suelo. A Christopher Jones se le hizo realidad uno de los peores miedos de cualquier paracaidista: se desmayó en plena caída libre, a 2700 metros de altura, pero sobrevivió para contarlo. Mirá el video de ese momento.
«Afortunadamente mi jumpmaster logró para sacar mi cordón de apertura. Luego recuperé la conciencia y aterricé sano y salvo», destacó el afortunado paracaidista.
El instructor Sheldon McFarlane se dio cuenta rápidamente del problema y cuando su pupilo estaba a 1200 metros del suelo pudo abrirle el paracaídas. Luego, Jones volvió en sí y pudo aterrizar por su cuenta.
«Fue posiblemente el momento más espeluznante de mi vida», dijo.