El Paraje Itatí, en 25 de Mayo, fue el centro de reunión este domingo donde las familias agrícolas vivieron la fiesta que los identifica y representa.
Cada año se torna tradicional la competencia de carros: avezados en la maniobra de guiar bueyes porque también son parte del trabajo cotidiano en la chacra, hombres y mujeres se animan a sortear escollos con velocidad y destreza, mientras animados espectadores los alientan compartiendo el asado en familia. Esa es la esencia de la fiesta. Después hay otras cosas que aglutinan a la concurrencia, como la música y la danza, y los sorteos estímulo.
Pasadas las 15 de este domingo, el vicegobernador llegó al imponente predio lindante con la Escuela 150, y saludando a los pobladores y visitantes, siguió de cerca el programa previsto. En un mensaje a los presentes, los felicitó por la magnitud del encuentro en el que se destaca “el trabajo, la producción, y el esfuerzo. Tarea que merece este momento de compartir entre amigos y en familia”, subrayó el vicegobernador.
La Fiesta del Carro tiene un fuerte arraigo en la comunidad de productores de la zona. La fiesta popular comenzó en Alba Posse hace varios años, y esta, en 25 de Mayo, intenta seguir el mismo espíritu: el encuentro, la celebración y la amistad.
Passalacqua, junto al intendente Mario Dowin y a los organizadores, acompañó el sorteo de premios, donde el más importante fue un automóvil 0 km. A manera de estar presente también y en reconocimiento al trabajo de los agricultores, la Vicegobernación donó una motosierra que fue el premio a uno de los mejores competidores en la travesía del carro.
“Quiero saludar y dejar mi afecto a quienes ganaron premios y a quienes no ganaron, porque en realidad acá ganaron todos; esta fiesta es el premio a los productores, a la gante de trabajo que pueblan nuestras chacras. Los felicito”, destacó el vicegobernador.