Las semanas de lluvias torrenciales, monzones, inundaciones generalizadas y deslizamientos de tierra en Bangladesh, India y Nepal afectaron a millones de niños y familias. Desde UNICEF se estima que más de 4 millones de niños se han visto afectados por la situación y necesitan apoyo urgente para mantenerse a salvo. «Incluso en una región tan familiarizada con el impacto devastador del clima extremo, las lluvias monzónicas, las crecientes inundaciones y los continuos deslizamientos de tierra están dificultando la vida de los niños y las familias afectadas», aseveró Jean Gough, directora regional de UNICEF para el sur de Asia.