Un testigo declaró que el sospechado de matar y enterrar debajo de un pelotero a su concubina «golpeó salvajemente en todo el cuerpo a su mujer embarazada con un cinto». En tanto, la Justicia libró una orden de detención.
Vecinos y familiares de Oscar Daniel Raul Abramo , sospechado de matar y enterrar debajo de un pelotero a su mujer, en una vivienda de Villa Elisa, Buenos Aires, afirmaron que el hombre ejercía violencia sobre la víctima. En tanto, la Justicia libró la orden de detención del imputado tras el pedido del fiscal de la causa, Marcelo Romero, por homicidio doblemente calificado.
Escurra, de nacionalidad paraguaya, tenía cuatro nenas de 2, 4 y 5 años y una bebita de 5 meses. Según la familia, esta última es hija de Abramo, aunque distintas fuentes policiales y judiciales aseguran que no, pese a que “él la inscribió como propia”.
Romero entiende que existen suficientes elementos para que Abramo quede detenido por el asesinato de Sonia Mabel Morel Escurra. El fiscal considera el crimen de Morel Escurra se encuentra agravado por el vínculo y por haber sido perpetrado por un hombre a una mujer mediante violencia de género.
Para el fiscal, la víctima había sufrido en reiteradas ocasiones episodios de violencia y el rechazo hacia su vida lo expresa el hecho de que sobre el lugar donde enterró el cuerpo.
«Una persona violenta»
Mientras que un primo de Abramo que declaró como testigo describió al imputado como «una persona violenta y maltratadora para con la víctima», un vecino de la pareja -quien según consignaron fuentes judiciales fuera testigo presencial de los episodios de violencia de los que continuamente era víctima Morel Escurra por parte de su concubino- esgrimió en su declaración que en una oportunidad el imputado «golpeó salvajemente en todo el cuerpo a su mujer embarazada con un cinto sin ningún tipo de reparo por la presencia de extraños y terceros».
El fiscal Marcelo Romero, que «se hizo la autopsia y el informe preliminar determinó que la causa de muerte fue por síndrome asfíctico por sofocación».
El fiscal del Departamento Judicial La Plata que instruye la causa, Marcelo Romero, explicó que «se hizo la autopsia y el informe preliminar determinó que la causa de muerte fue por síndrome asfíctico por sofocación».
Romero precisó que la víctima, Sonia Morel Escurra (25), «tenía un corte en la frente de tres centímetros y un hematoma en el maxilar izquierdo» y añadió que «aparentemente, (el asesino) la desmayó de un puñetazo».
«Pero ambas lesiones no son mortales, no son causal de muerte. Escurra murió porque el asesino la enterró viva», detalló y con respecto a la data de la muerte, afirmó que la mujer fue asesinada «hace más de un mes».
El informe preliminar de autopsia, suscrito por los doctores Andrés Lamotta, Andrea Scaroni y Natalia Alpaca, integrantes del Cuerpo Médico Forense Departamental La Plata, explicita que «el cuerpo no presenta lesiones contuso cortantes; sólo un corte superficial en la parte superior de la frente de 3 cm de longitud y un gran hematoma en la parte izquierda de la cara, a la altura del maxilar, no siendo causales del deceso ni la herida ni el golpe».
Para arribar a una conclusión definitiva sobre las causas de la muerte de Escurra, en tanto, los médicos que realizaron la necropsia ya remitieron diversas muestras para efectuar peritajes complementarios de patología y toxicología forenses.
Por el hecho, el juez de Garantías platense Pablo Raele dispuso la detención del esposo de la víctima, Oscar Abramo (39), quien quedó acusado del delito de «homicidio doblemente calificado por el vínculo y violencia de género», que prevé una pena de prisión perpetua.
